Elisabeth Porrero

Elisabeth Porrero


La vejez en el Madeira Film Fest

12/04/2023

Una mujer anciana vive sola en una casa donde aparecen hormigas. A partir de esa idea, el director austriaco Paul Ertl realizó un magnífico cortometraje, titulado Rupture. A través de él se invitaba a reflexionar sobre la soledad, la tristeza y ¿por qué no? también los buenos momentos que puede experimentar una persona mayor que vive sin compañía.
Este corto fue uno de los participantes en el prestigioso y asentado festival internacional Fantastic Film Fest, que se celebra en Funchal (Madeira), desde hace siete años. Los directores españoles Jaume Quiles y Alberto Rodríguez lo capitanean en colaboración con el Ayuntamiento de la capital madeirense y varios artistas de esa preciosa isla. Ambos cineastas dirigen también el Festival de cine rural y ecológico Rural Film Fest que se celebra cada verano, actualmente en Elche, y que tuvo sus inicios en nuestro vecino Fuencaliente.
Confieso que yo era poco asidua al cine fantástico, pero obras como Rupture me han sorprendido muy gratamente. El arte, a través de elementos casi mágicos, puede convertir la situación que nos parezca más trágica en otra repleta de esperanza y es lo que consigue esta obra. Con una cuidada fotografía y banda sonora, además de la brillante interpretación de su protagonista, Berta Kammer, es capaz de dotar de una magnífica luz a una situación que comenzaba de un modo terriblemente oscuro.
Su director ha querido tratar la soledad en la que habitan muchos ancianos, la placidez con la que pueden vivirla, aunque desde fuera haya quien piense lo contrario, su derecho a ser felices o la tendencia a pensar en que sufren demencia ante cualquier cosa que hagan y aparentemente no nos cuadre. La actitud de su hijo es un perfecto retrato de lo que sucede en muchos casos, oscilando entre la preocupación por su madre y el deseo de solucionar el problema con juicios previos tal vez injustos.
La obra deja también espacio a la solidaridad, en forma de una vecina solícita que atiende y ayuda a la anciana cuando cree encontrarla más débil.  Todo ello se nos muestra envuelto en un atractivo halo de misterio que se cierne sobre la protagonista, con la aparición de unas hormigas. Estos insectos han sido la perfecta metáfora que se ha utilizado para dibujar los miedos que pueden acechar, en este caso a las personas ancianas, y con los que hay que tratar de convivir.
Rupture fue una de las obras galardonadas, sin duda alguna, merecidamente, como mejor cortometraje y su protagonista Berta Kammer, como mejor actriz.
En otros de los cortometrajes seleccionados y proyectados en el Festival se trataron temas como la igualdad, la inclusión, el abuso de poder para captar personas adeptas a sectas, violencia de género o las leyendas sobre zombis.
Sin duda hay que agradecer contar entre los cineastas nacionales a personas como Jaume y Alberto, que se dejan la piel para que festivales como este o el Rural Film Fest muestren, desde distintas partes del mundo, preciosas obras de cine comprometido y sigan apostando por el arte como herramienta de mejora de la sociedad.