Amigo Sancho, espero que al recibo de ésta te encuentres bien. Yo bien, gracias a Dios.
El Manchego está llevando a cabo una magnífica temporada, pero no sólo en lo deportivo, sino también en los social, como demostró el pasado sábado ofreciendo un homenaje a la junta directiva que logró el primer ascenso a Segunda B, con Manuel Navarro como presidente en la temporada 1993-94. 
Personalmente, viví muy de cerca este ascenso como colaborador de La Tribuna y como aficionado. 
Un ascenso que, a mi juicio, comenzó a conseguirse en el partido de Azuqueca, donde el presidente advirtió a la plantilla que o ganaban o las iban a tener crudas. Curiosamente ganaron aquel partido y no perdieron ninguno más en aquella liga, clasificándose para jugar el ascenso a Segunda B, donde se enfrentaron al Vélez, Cortegana y Mérida B. 
El primer partido se perdió en Vélez por 2-0, siendo premonitorio un cartel que decía que '¡Esto es Vélez y aquí no gana nadie!'. Después el Manchego ganó todos sus partidos y festejó el ascenso en el campo del Mérida Promesas. Para mí, fue un honor poder hacer aquella crónica de aquel primer ascenso y viví una alegría infinita como aficionado. Don Pedro Pardo abrió la Catedral para agradecer a la Virgen del Prado este éxito. El equipo había ascendido a Segunda B, como deseaba Manuel Navarro con todas sus fuerzas.
Una jornada para la historia y que se recordará también por el accidente que sufrió la expedición mancheguista a su regreso.
Bueno Sancho, nada más por hoy. Recibe un abrazo de éste tu amigo que lo es.