Amigo Sancho, espero que al recibo de ésta te encuentres bien. Yo bien, gracias a Dios.
Esto ya es otra cosa, amigo mío. Parece ser que han cambiado los tiempos aquellos en los que entre suspensiones, peligro de contagios, unas cosas y otras, el arranque del CD Manchego fue anómalo, y he de confesar que me creó algunas dudas con respecto al equipo, las cuales se han ido disipando con el paso de los partidos. Los de Míchel poco a poco han cogido ritmo de juego, logrando en las tres últimas jornadas siete puntos de nueve, que no son pocos, sobre todo teniendo en cuenta que cuatro de ellos los sumaron fuera de su feudo.
El pasado domingo, ante el Manzanares, se presentó un partido realmente complicado y duro, no de falta de deportividad, sino por la resistencia del equipo visitante, que creó más de un problema a los locales, los cuales en el segundo tiempo conseguían el gol de la victoria. Tres trabajados puntos que permitieron al equipo situarse nada menos que en segunda posición de la tabla tras once partidos jugados. Posición ésta que puede reafirmar esta tarde, y así lo esperamos, en su enfrentamiento con el Quintanar del Rey, que es cuarto, para luego ‘remachar los clavos’ el domingo frente al Balazote, que es quinto.
Pero los encuentros no se ganan en el autobús y estoy convencido de que Míchel mentalizará a sus jugadores de la dificultad del partido de esta tarde contra los conquenses, pero si los azulones mantienen su nivel de juego y confianza, no creo que se vengan de vacío de este aplazado. 
Como te decía al principio, esto ya parece otra cosa, pero no hay que dormirse en los laureles y seguir dando el do de pecho para acercarnos a nuestro objetivo.
Bueno Sancho, nada más por hoy. Recibe un abrazo de éste tu amigo que lo es.