El candidato de Vox a la Alcaldía de Ciudad Real, Ricardo Chamorro, asegura que el objetivo de su partido es «que cambien las cosas en Ciudad Real y para eso lo más importante es tener un gobierno estable, con acuerdos concretos y con medidas concretas, que, evidentemente, el PP no puede hacer solo porque no tiene mayoría absoluta». En este sentido se pronunció ayer a La Tribuna tras poner de relieve que Vox está «con la mano tendida» al PP dado que éste sólo tiene «mayoría simple», por lo que buscarán «configurar esa alternativa, si es posible configurarla».  

Lo que descartó Chamorro es que su partido se abstenga en la votación de Cañizares, «sobre todo porque los ciudadrealeños lo que han pedido es un cambio real y un gobierno tan débil con una mayoría simple, aunque ya sabemos que en segunda votación se puede aprobar, no es lo que cumple las expectativas», incidiendo en que Vox «lo que quiere es cambiar las cosas, no cambiar los sillones».

Chamorro también respondió a la pregunta de si pedirá ser alcalde de Ciudad Real: «No lo sé, la verdad, no me lo planteo, yo creo que la prioridad es que demos buen servicio a los ciudadanos», aseguró para poner de manifiesto a renglón seguido que su objetivo es», ahora también con la Diputación, cohesionar los pueblos de la provincia y dar un futuro a los ciudadanos».

Entre las cuestiones que considera prioritarias abordar en la ciudad se encuentra la limpieza. «Somos la cara de la provincia y somos una capital, no puede haber la suciedad que estamos viendo de manera constante». También se refirió a la apuesta de su partido por la bajada de impuestos, así como la ayuda a las familias y facilitar los trámites del Ayuntamiento a los ciudadanos. Sobre esos asuntos, reconoció que existen coincidencias con el programa del Partido Popular y que podrían facilitar el pacto para gobernar en Ciudad Real, «aunque no creando más oficinas ni más burocracia, como plantea el Partido Popular, porque me parece que crear más oficinas no es la solución, sino con lo que hay, hacer los reajustes o lo que se pueda llegar a hacer para que se dé un buen servicio a los ciudadanos y que el Ayuntamiento de Ciudad Real esté al servicio de los ciudadanos, no los ciudadanos pagando multas, sanciones y unos impuestos que son de los más altos de toda España».

El de la formación de Abascal se mostró especialmente crítico con la gestión que se ha hecho desde el Ayuntamiento en los últimos ocho años y lamentó la falta de «proyectos de envergadura» que permitan que los jóvenes puedan tener un futuro en la ciudad.