Un invierno cálido en plena ola de frío

R. Ch.
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La estación meteorológica se despide como la séptima más calurosa en un siglo y la más lluviosa en más de una década gracias a Efraín

Una mujer se protege del frío en Ciudad Real con bufanda y gorro. - Foto: Tomás Fernández de Moya

Ciudad Real despide el mes de febrero con los días más fríos del invierno que, en lo climatológico, se acabó ayer. Para el final del invierno astronómico habrá que esperar hasta el próximo 20 de marzo con el equinoccio de primavera, pero para los meteorólogos el invierno puso este martes su punto y final y lo hizo con mínimas de casi siete grados centígrados bajo cero. La masa de aire polar instalada en la Península, junto a la borrasca Juliette han dejado un paisaje invernal a las puertas de la primavera y pese a que este invierno se sitúa, en Ciudad Real, entre los más calurosos desde que hay registros, en más de un siglo.

Los datos son los de la Agencia Estatal de Meteorología, la Aemet. Desde el 1 de diciembre y hasta ayer, Ciudad Real capital ha tenido una temperatura media de 8,2 grados. Desde 1921 solo hay seis inviernos más calurosos. El que más, el de 1990. La temperatura media fue de nueve grados, con máximas, entonces, de 23. Este año han sido dos los días en los que el termómetro ha pasado de los 20 grados y 23 días en los que las mínimas fueron negativas. El día más frío fue precisamente el de ayer, con -4,1 grados centígrados. El más caluroso no hay que buscarlo tampoco muy lejos en el calendario. Fue el 20 de febrero, el lunes de la semana pasada. El adelanto primaveral que vivió la provincia durante esas jornadas se tradujo en los termómetros en máximas de casi 22 grados centígrados.

el más lluvioso en 12 años. Pero si este invierno será recordado por algo será por la lluvia. Ha sido el invierno más lluvioso en una década y aunque lleva más de 40 días sin llover sobre buena parte de la provincia, el paso de la borrasca Efraín, a mediados de diciembre, dejó en medio mes más de 100 litros por metro cuadrado. Cayó tanta agua en dos semanas como en los 225 días anteriores. Eso sirvió, sobre todo, para recargar los pantanos. Torre de Abraham empezó el invierno con 10,8 hectómetros y lo acaba con 41; el Gasset pasó de 8,54 hectómetros el 1 de diciembre a los más de 16 con los que finaliza la estación meteorológica, mientras que Peñarroya ganó ocho hectómetros; Vallehermoso, dos; y la Cabezuela uno. Eso sí, Efraín apenas se notó en las reservas de Vega del Jabalón, que estaba y sigue seco: apenas cuenta con medio hectómetro cúbico de agua.