Bestial paliza entre menores en el pleno centro de Sabadell, Barcelona. Una menor de 14 años se ensaña con una compañera, mientras otras personas grababan la paliza con sus teléfonos móviles sin hacer nada por detenerla y decirle a la agresora, a la que identifican como María, que cese en su brutal violencia porque «hay gente». El hecho, que sucedió el pasado 26 de febrero, fue denunciado por los padres a los Mossos d’Esquadra, según confirmó ayer la Policía catalana.
Se trata de un nuevo episodio de violencia infantil que ha levantado la polémica sobre cómo es posible que se produzcan este tipo de actos entre los mas jóvenes. Los expertos se preguntan cuáles son los valores y educación que reciben los menores para que ni el agresor ni las personas que le rodean y graban con el móvil decidan detener tales actuaciones de violencia extrema.
El documento ha sido rápidamente difundido en las redes sociales y en él se aprecia cómo la agresora arrastra por el suelo y propina varias patadas y puñetazos a la víctima, mientras los que filman se limitan a decir: María, ya, No le pegues, María, por favor y Que hay gente..
Según confirmó la Policía, «el 26 de febrero se presentaron dos denuncias por estos hechos, una de la víctima y otra de la presunta agresora». Las dos menores estudian en institutos diferentes. La víctima, indicaron los agentes, «no llegó a necesitar asistencia médica, pese a la violencia y agresividad que se ve en la grabación».
Según el cuerpo policial, ambas chicas son menores de edad, por lo que el caso ha quedado en manos de la Fiscalía, que decidirá si imputa a la agresora y si toma medidas cautelares.
En su perfil de Facebook, la muchacha violenta justificó su acción asegurando que pegó a la joven porque tenía motivos y porque «lo que hizo -la víctima- no tenía perdón», indicó.
«Estoy harta de la gente que se mete en mi puta vida, aver gente, si le pege a cierta persona fue porque tenía motivos y que se ponga de rodillas ke?», escribió textualmente en la red social
En su escrito también pidió a quienes le reprochan su actitud de que se informen mejor antes de hablar y aseguró que quienes conocen sus motivos la entienden y apoyan.
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Por su parte, la Fiscalía de Menores de Barcelona remitirá a la Dirección General de Atención a la Infancia y a la Adolescencia (Degaia) el caso al no ser imputable por tener la agresora menos de 14 años.
Según explicaron fuentes judiciales, la joven tiene 13 años y la víctima 14, ante lo que el artículo tres de la Ley de Responsabilidad Penal de los Menores impide actual al Ministerio Fiscal y tampoco puede estudiar la imposición de medidas cautelares.
El suceso fue denunciado por los padres de la víctima y también por los de la agresora, en este caso por la difusión del vídeo.
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