Chistes, miradas, pellizcos... ¿acoso leve, grave o muy grave?

L.G. E.
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CCOO ha elaborado una guía para que las empresas implanten protocolos de acoso sexual o por razón de sexo. Incluye una tabla para catalogar comportamientos

Chistes, miradas, pellizcos... ¿acoso leve, grave o muy grave? - Foto: Alberto Rodrigo

CCOO de Castilla-La Mancha ha elaborado una guía para que las empresas implanten protocolos de acoso sexual y por razón de sexo. El documento recoge una tabla en la que se pueden identificar conductas, agrupadas por escala de gravedad. 

Piropos, chistes, pedir citas. Son algunos ejemplos de comportamiento verbal que entra en la tipología de acoso sexual leve. También entra aquí difundir rumores sobre la vida sexual de una persona, hablar de las habilidades sexuales o hacer comentarios groseros sobre el cuerpo o apariencia.

Miradas lascivas. Es otro ejemplo de un comportamiento que entra en la tipología de acoso sexual leve.

Preguntar sobre la vida sexual. Aquí ya se entra en actidudes verbales de acoso sexual grave. Igual que presionar en una situación de post-ruptura. 

Gestos obscenos. También está catalogado como acoso sexual grave.

Arrinconar, propiciar situaciones a solas. Son comportamientos físicos también de acoso sexual grave, como provocar el contacto físico «accidental».

Insinuaciones directas, enviar contenido sexual. Aquí ya se entraría en un acoso sexual muy grave.  

Pellizcar, masajes no deseados. Son ejemplos de acoso sexual muy grave, que se resume en ejecutar un contacto físico no solicitado.