El arquitecto daimieleño David García-Manzanares ha iniciado la promoción de su último libro titulado "Fisac: Obra Completa". En esta publicación, García- Manzanares se sumerge en la figura del destacado arquitecto Miguel Fisac, explorando su legado y motivaciones a través de una colección de relatos y anécdotas.

La inspiración surge de dos impulsos fundamentales en la vida del autor. En primer lugar, una conferencia del presidente de la Fundación FISAC, Diego Peris, que tuvo lugar en Oporto el año pasado. Durante más de dos horas, Peris mantuvo cautivados a los estudiantes de arquitectura con su charla en español, lo cual destacó la relevancia y el impacto duradero del maestro Miguel Fisac. Este hecho despertó aún más el interés de García-Manzanares en la figura del arquitecto.

El segundo impulso proviene de la interacción con su esposa e hijas, quienes lo acompañan en sus viajes y visitas a edificios. Con el objetivo de hacer estas experiencias más entretenidas y comprensibles para sus hijas, el autor recurre a relatos históricos y culturales para explicar el significado de los edificios y las intenciones del arquitecto. Esta combinación de experiencias personales y la influencia de Fisac culmina en la creación de 'Fisac: Obra Completa'.

Legado, relatos y anécdotas en 'Fisac: Obra Completa'

El texto consta de veintiún relatos que abarcan veinte trabajos y la exposición mencionada en Oporto. Sin embargo, García no busca ofrecer un enfoque puramente técnico de la arquitectura, sino más bien "capturar la atención del lector a través de historias paralelas a la biografía de Fisac". Cada capítulo se relaciona con diferentes autores, como Stanley Kubrick, Kennedy, Velázquez o Bach, entre otros.

Como ejemplo, la relación entre la Iglesia de Santa Ana de Moratalaz con 'Mortal y rosa', de Paco Umbral, porque siendo amigos -Fisac y Umbral-, ambos pasaron por el mismo episodio vital: la muerte de un hijo de apenas 6 años. Y ese entrelazado entre los versos de Umbral a la muerte del hijo, con la luz celeste y etérea de la iglesia de Santa Ana de Moratalaz, derramándose sobre la escultura de Anaik, ayuda no sólo a comprender la trayectoria arquitectónica, sino sobre todo y más importante aún, permite intuir levemente el dolor de Fisac al proyectar esta iglesia, que dedica a su hija fallecida.

Así, la elección de las actuaciones y las historias relacionadas con Fisac se basa en una "selección subjetiva" como apunta García-Manzanares, y como también se refleja en el prólogo. Reconoce que "cada persona tendría su propia selección de las mejores obras de Fisac", por lo que se basó en su gusto personal y consideraciones humanas y sentimentales al realizar la elección, añadiendo todas las construcciones de Fisac en Daimiel. Cada una aborda estos aspectos que muestran la versatilidad y adaptabilidad de Fisac a lo largo de su carrera.

El autor tiene previsto presentar el libro en septiembre en Daimiel y desearía que fuera en el Centro del Agua, uno de los enclaves locales arquitectónicos de la firma Fisac. Para García-Manzanares, este evento será "un motivo de orgullo personal y una oportunidad para compartir su trabajo con los daimieleños", reseñó.

García reconoce que la realización de un volumen de estas características es un proceso complejo y siempre incierto. Sin embargo, menciona la posibilidad de una segunda parte titulada "Obra Completada", donde se incluirían otras veinte edificaciones relevantes de Fisac.

Mientras tanto, queda esta como "un homenaje a la figura de Miguel Fisac y una invitación a adentrarse en su legado a través de relatos y anécdotas. Un ejemplar con el que el autor daimieleño espera capturar la atención del lector y transmitir la importancia de la arquitectura de forma accesible y atractiva.