El crecimiento vegetativo de la población -la diferencia entre nacimientos y defunciones- fue positivo en España en el primer semestre de 2014. No así en Ciudad Real, una provincia en la que el padrón no acaba de salir de los números rojos. De enero a junio fallecieron 2.697 personas, un 5,5 por ciento menos que en el mismo periodo de 2013. Asimismo, el número de nacimientos registrados en los seis primeros meses de este año ha bajado un 2,5 por ciento, con 2.128 nuevos niños.
El estudio del Movimiento Natural de la Población, publicado ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), refleja que Ciudad Real no es una de las provincias que mantengan el tipo demográficamente hablando. Por un parte, la natalidad está capa de caída ya que en 2013 se registró un 6,1 por ciento menos de bebés alumbrados en los hospitales ciudadrealeños (de 4.889 a a 4.558).
La reducción está motivada, en gran parte, por un retraso de la maternidad (31,6 años en 2013) que complica las posibilidades de tener más de un vástago, dejando a muchos sin hermanos y pocos esfuerzos para invertir la pirámide poblacional asegurando el futuro del país. Así, nos encontramos con un menor número de mujeres en edad fértil y el descenso del número de hijos por familia (1,29), algo a lo que la actual crisis socieconómica también contribuye. No en vano, atendiendo a los datos de 2013, en el 68,6 por ciento de los nacimientos la madre tenía más de 30 años, dos puntos porcentuales más que en 2012.
En la provincia la natalidad inició su senda descendente entre enero y junio de 2009, cuando cayó un 5,1 ciento al pasar de 2.726 a 2.585 nacimientos. El Instituto Nacional de Estadística (INE) advierte de que continúa la tendencia descendente en el número de nacimientos de hijos de madre extranjera que, en 2013, supusieron en la provincia el seis por ciento del total frente al siete por ciento de un año antes.
En este sentido, Estadística explica que el número de mujeres de nacionalidad extranjera también ha decrecido debido al efecto de la emigración y a las adquisiciones de nacionalidad española que se han concedido en la primera mitad de 2014. Cabe recordar que en 2007, el año cero de la gran recesión, representaban casi el 15 por ciento. Los tiempos han cambiado y las estadísticas no dejan lugar a dudas. (Más información en la edición impresa)