Eran aproximadamente las 7,30 horas de la mañana cuando la estación meteorológica, denominada ‘Curiosity’, llegaba a Marte. Se trata de un sofisticado vehículo robótico no tripulado que Mars Science Laboratory (MSL) de la NASA envió al planeta rojo a finales de 2011, el cual cuenta con tecnología albaceteña, después de que la empresa Desarrollo de Componentes Aeroespaciales (DCA), ubicada en el polígono industrial de Romica, haya sido la responsable de realizar una pieza de la estación, que se encargará de medir el viento.
Los propietarios de DCA, los hermanos Antonio y María Ángeles López Peinado, mostraron ayer su satisfacción por que la operación se haya realizado con éxito y que la NASA ya haya empezado a recibir imágenes y datos sobre el planeta rojo. En este sentido, María Ángeles López declaró que «cuando Curiosity ha aterrizado con éxito, los saltos de alegría que pegaban los trabajadores de la NASA eran los mismos que pegaba yo. Es una alegría poder decir que estamos en Marte».
Asimismo, la empresaria explicó que la estación meteorológica permanecerá dos años en Marte, donde medirá las condiciones atmosféricas del planeta y «buscarán si existen o han existido condiciones para la vida».
López Peinado dijo que la pieza fabricada en DCA es un componente mecánico que forma parte de la estación meteorológica, que pesa unos 70 gramos, y reseñó que «si Curiosity es del tamaño de un vehículo, la pieza realizada en Albacete cabe en la palma de la mano». Este componente se desarrolló aproximadamente durante un año (en 2008) y, en total, llevaron a cabo 12 piezas, 11 que se utilizaron en los ensayos realizados por el Instituto Nacional Aeroespacial (INTA) y, la última, que es la que ayer llegó al planeta rojo. DCA comenzó su andadura en el año 2005 y no es la primera vez que fabrican productos para mandar al espacio. Han llevado a cabo piezas para satélites, aunque sus trabajos, principalmente, son de aeronáutica.