El pasado 12 de mayo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) cerró el plazo de inscripción para la primera compra colectiva de carburante impulsada desde la organización, una iniciativa que pretende reunir a un gran número de demandantes de gasolinas y gasóleos para, a través del peso que supone la agrupación de ellos, negociar con las empresas petroleras hasta encontrar la oferta más ventajosa y que permita un mayor descuento para los mismos durante un año. Según el registro de la OCU, en la iniciativa se han inscrito 211.610 usuarios de todo el país, y la propuesta de la organización también ha calado en la provincia de Ciudad Real, donde el número de inscritos en la compra colectiva de carburante es de 1.561 personas.
En toda Castilla-La Mancha son más de 8.000 las personas que se han inscrito para formar parte de la primera compra colectiva de carburante impulsada por la OCU, que ya puso en marcha en su día iniciativas similares para la compra colectiva de gas o de electricidad. La provincia de Ciudad Real es la tercera de la región en la que más personas se han inscrito en esta propuesta, que deberán confirmar su participación en la misma en el momento en el que se dé a conocer la empresa que resulte 'adjudicataria' de la acción. La provincia castellano-manchega que más habitantes suma a esta iniciativa es Toledo, con más de 3.000 personas (3.054). En el resto de provincias han respondido a la llamada de la OCU 1.750 residentes en Guadalajara, 1.187 de Albacete y 479 personas de Cuenca.
La compra colectiva de carburante funciona como una suerte de concurso 'público'. Una vez agrupados los consumidores que tomarán parte en esta acción, más de 211.000 en toda España, la OCU insta a las empresas del sector, en este caso las petroleras, a presentar una oferta que ofrezca ventajas respecto al precio de mercado a esos mismos consumidores por la compra de combustible durante todo un año. Al tratarse de una iniciativa de calado nacional, las empresas que quieran optar a este grupo de consumidores deberán tener una red suficiente de surtidores en todo el territoro español. Una de las grandes empresas petroleras presentes en el país, BP, presentó su propuesta hace unos días, pero la OCU no ha dado aún a conocer qué firma se 'quedará' con los más de 211.000 clientes durante un año.
Un factor más. La cifra de ciudadrealeños que tomará parte en esta compra colectiva de carburante no es muy elevada, pero aun así es una práctica que no cuenta con una visión positiva desde el sector. El vocal de la Asociación Provincial de Empresarios de Estaciones de Servicio, Julio Pomar, apuntó a que esta iniciativa «va a dirigir a 1.500 personas a una firma concreta durante todo un año, perjudicando la competencia con el resto de gasolineras».
La compra colectiva de carburante, que OCU fundamenta «debido a la falta de competencia del mercado español y la sensación de que los precios de los carburantes no reflejan la caída de precios del petróleo en los últimos tiempos», y en buscar «de un mercado del carburante más transparente», asoma para el sector en un momento en el que tratan de combatir «la competencia desleal que suponen las estaciones de servicio desatendidas, que también están haciendo mucho daño», por lo que puede sumar durante todo un año «un elemento más contra el que luchar por parte de las gasolineras de la provincia».
Pomar, desde la patronal provincial del sector, volvió a hacer un llamamiento a los consumidores «para que busquen las estaciones de servicio con bandera, porque son las únicas que de verdad garantizan servicio y producto».