La resaca electoral hunde la licitación de obra pública

A. Criado
-

Entre enero y marzo, las administraciones licitaron proyectos por valor de 28,5 millones de euros en la provincia, un 46% menos que en el mismo trimestre de 2023, cuando se superaron los 52 millones

Trabajadores de una obra adjudicada por el Gobierno regional - Foto: T. F.

La obra pública, un pilar importante de la actividad económica de cualquier territorio, ha dejado cifras preocupantes en el primer trimestre del año. Entre enero y marzo, las administraciones públicas han sacado a licitación proyectos por valor de 28,5 millones de euros en la provincia de Ciudad Real, un 46% menos que en el mismo periodo del año anterior, en el que se rozaron los 53 millones. Es la cifra más baja desde 2020, un ejercicio que estuvo marcado por el estallido de la pandemia de coronavirus: el 31 de marzo se confirmó el primer positivo en España. El pico más alto se registró en 2022, con cerca de 60 millones.

Según el último informe de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (Seopan), los ayuntamientos y el Gobierno central concentran el 90% de la inversión en obra pública en la provincia, con 13,2 y 12,5 millones de euros, respectivamente. Las licitaciones de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha apenas dejaron 2,8 millones en Ciudad Real. Por otro lado, prácticamente la mitad del importe licitado en este primer tercio del año corresponde a obra civil (14,6 millones), mientras que la otra mitad se circunscribe a la edificación (13,9 millones). Baja en ambos casos en relación con 2022, especialmente la obra civil.

La caída de la licitación de obra pública no se reduce exclusivamente a Ciudad Real, sino que es generalizada en todo el territorio regional. Los proyectos licitados en Castilla-La Mancha en este periodo ascienden a un total de 110 millones de euros, lo que representa un desplome del 67,3%, puesto que esta cifra alcanzaba los 336,4 millones hace doce meses. En términos cuantitativos, Ciudad Real lidera el ranking autonómico, por delante de Albacete (25,9 millones) y Toledo (23,8 millones).

El presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Construcción (APEC), Manuel Carmona, apunta al factor electoral como clave: «Las licitaciones se disparan en un año electoral y en el inmediatamente anterior, y una vez que pasa la cita electoral, tanto por los esfuerzos presupuestarios hechos como por la conformación de los nuevos gobiernos, aunque en ellos haya continuidad, la licitación se frena o se modera». Recuerda, en este sentido, que en 2023 se celebraron elecciones generales, autonómicas y municipales.

En lo que al liderazgo de Ciudad Real se refiere, Carmona explica que «en las cifras de licitación pública hay que tener en cuenta el importe desagregado de las obras que se licitan», y que es «una situación que puede ser cambiante en función de los procedimientos administrativos que llevan dichas licitaciones». «En 2021, Ciudad Real casi dobló a la segunda provincia en volumen de licitación porque ese año coincidieron dos o tres obras de importes elevados de diferentes administraciones», pone como ejemplo.

El sector ve en el compromiso del Gobierno de aumentar el parque público de vivienda asequible, un clavo al que aferrarse para remontar estas cifras. «Nos alegramos de que por fin las diferentes administraciones sean conscientes de que hay que tomar medidas en materia de acceso a la vivienda, porque parece que solo se acuerdan cuando hay elecciones», enfatiza Carmona, que considera necesario, tal y como apunta el Banco de España, que «se tomen medidas que pasan principalmente por avales o ayudas a la compra, sobre todo para jóvenes, coordinación entre las diferentes administraciones en políticas de vivienda, fomentar la colaboración público privada y, sobre todo, mejorar la gestión administrativa relacionada con el suelo, las licencias y el urbanismo, que permitan acelerar procedimientos y poner vivienda en el mercado».