La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha comenzado ya la obra para recuperar el palacete de la Cruz Roja en Ciudad Real y este viernes se firmó el acta de replanteo entre el Gobierno regional y la empresa Tragsa encargada de la reconversión de este edificio de principios de siglo en un centro de acogida a víctimas de agresión sexual. Se trata de una actuación esperada en la capital y que implica que, a partir de ahora, empieza a contar el tiempo para recuperar un edificio que fue adquirido por el Gobierno regional. 

En la puerta se pueden apreciar ya los carteles de la zona de obras y esta mañana se han podido ver operarios de la empresa, iniciando los primeros trabajos que conllevará la mejora de la instalación eléctrica y la renovación de los elementos dotacionales, antes de iniciar la obra de recuperación de los elementos de corte modernista, que eran una de las claves del inmueble.  

De hecho, la empresa Tragsa, lleva semanas iniciando los contratos para el suministro de materiales necesarios para la obra, como los falsos techos o la carpintería, ante una inversión de 2,7 millones de euros y un plazo de ejecución de 13 meses. "El palacete de la Cruz Roja es un lugar emblemático para Ciudad Real desde el punto de vista arquitectónico y patrimonial, además de que ahora también lo va a ser desde el punto de vista de la justicia que hacemos con las víctimas de violencia sexual", señaló la consejera de Igualdad, Blanca Fernández, a primeros de mes, cuando anunció que a finales de abril, primeros de mayo, como tarde, comenzaría esta obra. La idea al ubicar en este edificio el centro de atención a las mujeres víctimas de agresiones sexuales es que no se quede oculto, ubicarlo en "un edificio visible y privilegiado que todo el mundo conoce y sabe dónde está porque queremos proteger a las víctimas, no las queremos ocultar por más tiempo".

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La idea con esta obra es recuperar el edificio no como se conoció en el año 2006 sino cómo se ideó, como casa del boticario Conrado López, para lo que se recuperarán suelos y elementos decorativos de todo el inmueble de principios de siglo. La idea es recuperar seis elementos claves que han trabajado sobre ellos, como los suelos y molduras, las barandillas, las forjas, los colores o las filigranas. Como idea de esta actuación, los arquitectos explicaronen cada ventana y puerta hay pequeñas diferencias de tamaño y se han tenido en cuenta a la hora de la rehabilitación, igualmente se han creado vaciados para recuperar los elementos que se llevó la piqueta en 2006 antes de la compra del inmueble por el Gobierno regional.