Zinedine Zidane buscará el próximo domingo, en el partido contra la UD Las Palmas, su primer triunfo en la isla de Gran Canaria, donde no ha podido ganar ni como futbolista ni como técnico en sus dos anteriores visitas.

El preparador francés lideraba el equipo blanco que, en octubre de 2001, jugó en el desaparecido Estadio Insular y cayó por 4-2 ante el conjunto local. Ese es el último precedente liguero entre ambos clubes en terreno isleño. Aquella noche, ‘Zizou’ anotó un gol de falta directa en el minuto 41 de la primera parte, y que suponía el empate a dos, pero los ‘amarillos’ aprovecharon la expulsión de Munitis en la segunda mitad para anotarse la victoria en la recta final del choque, con doblete del ahora bético Rubén Castro, por entonces con solo 20 años.

El Real Madrid formó aquel miércoles con Íker Casillas; Míchel Salgado, Fernando Hierro, Iván Campo, Karanka; Geremi, Makelele (Morientes, min. 81), Zidane (Celades, min. 68), Solari (Guti, min. 80); Munitis y Raúl. Por su parte, en el equipo inicial de la Unión Deportiva se alineó como único superviviente de la actual plantilla isleña el defensa Ángel López, quien disputó sus primeros minutos de esta temporada el pasado fin de semana en Villarreal.

Zidane también participó como futbolista en las otros dos islas de la provincia de Las Palmas, Fuerteventura y Lanzarote, en sendos partidos de la Copa del Rey en la temporada 2001-2002, saldados con triunfos, por 0-4 ante la UD Pájara-Playas de Jandía, y por 1-3 frente a la UD Lanzarote, en Arrecife.

El internacional galo visitó Gran Canaria por segunda vez en noviembre de 2014 dirigiendo al Real Madrid Castilla, en Segunda División B, ante Las Palmas Atlético, ahora en Tercera. Tampoco salió victorioso de su segunda presencia en la isla redonda. Su equipo perdía al descanso por 2-0, aunque Raúl de Tomás y Cristian Benavente, éste en el minuto 89, salvaron al menos un punto para el filial blanco.

Plan para Bale. Una de las dudas que tendrá el galo en la visita de su conjunto al estadio canario será la de Gareth Bale, que, a pesar de haber sido titular el pasado martes ante la Roma, ayer no se entrenó con el equipo. Una circunstancia que se engloba dentro de un nuevo plan preparado por el club para el delantero galés.

Harto de las continuas lesiones musculares del ‘expreso de Cardiff’, la entidad ‘merengue’ va a apostar ahora por la máxima precaución con el futbolista y el ahorro de esfuerzos para evitar una nueva recaída, después de que el 17 de enero sufriese su sexta dolencia en el sóleo en los dos años y medio que lleva en la capital de España. Aunque en principio se habló de tres semanas de baja, la recuperación no fue bien y no reapareció hasta el pasado sábado, cuando entró a los 65 minutos del partido ante el Celta de Vigo, consiguiendo, incluso, un gol.

La lesión de Bale, además, no ha sido la única con la que ha tenido lidiar Zidane, y en su día también Benítez cuando era él quien ocupaba el banquillo blanco. De hecho, la plaga de dolencias que ha padecido la plantilla ‘merengue’ provocó una catarata de críticas hacia los servicios médicos del club que ahora se centran en tener listos a los futbolistas de cara a la Champions, el gran objetivo del conjunto blanco que da ya la Liga por perdida.