Después de escribir dos novelas, ¿cómo se siente en la piel de un autor de relatos?

Muy contento. Pensaba que me iba a costar más. Como hasta ahora siempre había escrito novelas en las que te puedes expandir más, creía que pasar a relatos iba a ser más dificultoso. Pero resulta que no, me ha sido relativamente fácil escribir estas historias, aunque tiene su complicación, porque tienes que meter una trama en pocas páginas. Eso tiene su trabajo. Objetivo conseguido, y estoy muy contento porque, además, venía siendo lector de relatos desde hace un tiempo y me apetecía mucho. Es la primera vez y he abierto una nueva faceta dentro de mi obra literaria.

¿De dónde salen las historias de Queridos Reyes Magos?

Son historias absolutamente inventadas, lo que pasa es que en algunas sí que aparece algún misterio o alguna leyenda de la provincia que yo ya había visto antes, como si fuera una bibliografía de tradición oral. En algunos relatos me basaba en mi propia vivencia de las Navidades siendo pequeño o adolescente. Pero también leyendo muchos relatos, porque así es la manera también de aprender, hacer tus propios relatos. Todo se ha hecho tirando de inventiva, cogiendo un poquito de información y con la ilusión que tiene la Navidad, que a mí me gusta mucho.

¿Piensa mantener sus tramas en Ciudad Real o va a empezar a buscar otros espacios?

En la tercera parte de la trilogía de La noche, además de Ciudad Real, va por otros sitios de Castilla-La Mancha. En estos relatos no están ambientados en Ciudad Real, aunque algunos de ellos sí hay un par de guiños a la capital. Los he situado en pueblos sin nombre y en ciudades pequeñas de interior, también sin nombre. A quien sea de Ciudad Real leer estos cuentos le va a recordar costumbres locales, pero no están ambientados en ningún sitio concreto, pero el aire manchego no se me va.

Algo llamativo es que los seguidores de sus novelas se han lanzado a recorrer las calles en visitas guiadas que siguen sus tramas, ¿cómo vive ese seguimiento?

Estoy encantadísimo. Me lo llegan a decir cuando estoy escribiendo la primera novela y no me lo creo. Hasta ahora, en redes sociales, estoy recibiendo mucho cariño. La gente me trata genial cuando me ven por la calle y en las rutas me expresan mucho afecto, no sé cómo agradecérselo. Además, estoy orgulloso de representar a Ciudad Real en el mundo de la literatura, que creo que es una manera buena de representarla y de darla a conocer. 

¿Estos cuentos de Navidad pueden tener continuidad en otras épocas del año?

Es una idea que llevo pensando en estas últimas semanas después de que se hayan acogido tan bien. A lo mejor no estaría mal sacar relatos inspirados en otras festividades o incluso relatos atemporales o sin una festividad detrás, sino un libro de relatos y ya está. Incluso a lo mejor de corte más costumbrista todavía, porque es verdad que escribiendo me he ido dando cuenta que me gustan las partes en las que escribo sobre ello y especialmente en épocas un poquito más antiguas. 

Lo que sí estarán esperando sus lectores es que desvele la tercera entrega de su trilogía, ¿cuánto falta para eso?

Falta todavía porque he hecho parón precisamente por el proyecto este de los relatos navideños. Y luego, un escritor también necesita a veces descansar y orear un poco la mente. Si está muy metido con una cosa, el despejarse durante un tiempo está bien para luego retomar el proyecto con fuerza. Vas escribiendo otras cosas, aunque luego no vean la luz, pero vas probando otros estilos, escribiendo otro tipo de literatura. Pero creo que cuando pase toda la vorágine que está teniendo ahora mismo Queridos Reyes Magos, me sentaré tranquilamente a retomar esa tercera parte.

¿Piensa que podrías dar un paso más allá y llegar a un público de otras ciudades?

Creo que efectivamente ha llegado también el momento de salir de Ciudad Real, siempre con el arraigo, con la base de la gente de aquí y moverse por otros sitios. Y además estos relatos de Navidad, los puede leer cualquiera que viva en otras regiones o ciudades.