La aportación del arquitecto daimieleño Miguel Fisac a un mundo habitable es el motivo central del libro Miguel Fisac: vivienda, que esta tarde se presentó en la Biblioteca Pública del Estado en Ciudad Real.

La obra, la cuarta entrega a partir de su legado, es resultado del trabajo de cinco autores, los arquitectos Diego Peris, Javier Navarro y David García-Manzanares y los estudiantes de Arquitectura Almudena Frías y Adrián Merino, a quienes introdujeron ante el público el presidente del Colegio de Arquitectos de Ciudad Real, Federico Pérez Parada; y la vicedecana del Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha.

En unas declaraciones previas al acto, Diego Peris resaltó que la Fundación Fisac, que preside, guarda «más de 140 proyectos que en total suponen unas 4.300 viviendas» de Fisac, con lo que se rompe la idea de que estuvo alejado de los grandes concursos de vivienda pública. A este legado se suman viviendas particulares en diversas ciudades. 

Fisac llevó su apego a la tradición a la vivienda - Foto: Rueda VillaverdeDe esas viviendas de encargo, Peris reseñó que «tienen el sabor de la arquitectura popular de la zona en que se encuentran». Al mismo tiempo, introdujo en estas construcciones, «los hormigones, tanto en cubiertas como hormigones flexibles en las fachadas», lo que el estudio sobre su producción en este campo ofrece «todo un muestrario desde los años 40 hasta el final de su trayectoria, donde hay una diversidad y una pluralidad muy grande de edificios residenciales», que al mismo tiempo sirven para apreciar la evolución de Fisac como creador y de la propia arquitectura.

A su vez, Gema González destacó la importancia del trabajo realizado por el equipo redactor de esta obra, con el manejo de «una colección enorme de toda la aportación constructiva y teórica de Fisac». Del mismo modo, Federico Pérez Parada llamó la atención sobre la capacidad de Fisac de trabajar con el espacio, lo que se muestra en los planos que recoge el libro.