El pabellón Quijote Arena de Ciudad Real será el escenario el sábado 2 de diciembre del I Open Nacional de Kick Boxing, que además será la jornada final de la Liga Oficial de este deporte, que ya ha disputado pruebas en localidades como Laredo (Cantabria), Melilla, Oviedo, Madrid y Azuqueca (Guadalajara).
Esta competición de kick boxing amateur, está homologada por la Federación española y el Consejo Superior de Deportes, y citará en Ciudad Real a unos 600 deportistas desde los 5 hasta más de 50 años en modalidades como Tatami Sport (Light Contact, Point Fighting, Kick Light) y Ring Sport (K1, Full Contact, Lock Kick).
Junto a miembros de la organización, jueces, entrenadores, público y acompañantes, se estima que esta competición mueva a unas 3.000 personas, con toda la repercusión económica que conlleva.
Mario Cuerdo, promotor de este evento, que cuenta con el patrocinio y colaboración de la Diputación y Ciudad Real Deporte y numerosas firmas comerciales, ha anunciado que el deseo de toda la organización es que este evento sea el mejor de kick boxing que se haya celebrado nunca en España. Además, ha querido desterrar los tópicos que acompañan a los deportes de contacto, recordando que se trata de un deporte que se puede practicar desde edades tempranas y que tiene un carácter inclusivo, además de fomentar valores de disciplina, respeto y unión entre rivales y familiares.
En Ciudad Real, Mario Cuerdo ha encontrado la colaboración del Gimnasio AMM, cuyo representante, Quique Calero, ha considerado "un orgullo" poder colaborar en la organización de este evento, ya que se trata de un club con apenas año y medio de vida.
El evento comenzará a las 9 de la mañana y tendrá entrada gratuita.
Milagros Calahorra, vicepresidenta de la Diputación y responsable del Área de Deportes, ha valorado también el carácter inclusivo de este evento, resaltando el compromiso de a institución provincial con el deporte, como fuente de hábitos saludables y de valores. Pau Beltrán, concejal de Deportes del Ayuntamiento de Ciudad Real, resaltó el impacto económico para la ciudad dentro de su objetivo de que Ciudad Real sea un referente en la organización de eventos de primer nivel.