Libros estilo 'Fahrenheit 451'

D. A. F.
-

Antonio Rodríguez Menéndez promueve el método de la palabra vinculada para que las personas aprendan fragmentos de libros y los trasmitan en público a otras personas, al modo de la fantasía futurista de Ray Bradbury

Un momento de la charla - Foto: /LT

Personas que deciden convertirse en libros, hombres y mujeres, niños y mayores que asimilan una obra y se la ofrecen a los demás a través de la palabra hablada para así preservarlas de la destrucción y/o el olvido. Probablemente es lo más impactante de la novela Fahrenheit 451, que escribió el estadounidense Ray Bradbury en 1953, y de la película del mismo título que dirigió François Truffaut trece años más tarde. Este efecto del libro como vínculo entre personas y generaciones subyace también el la propuesta de Personas-libro que el próximo 23 de abril será una de las actividades a desarrollar en la Biblioteca Pública de Ciudad Real con motivo del Día Internacional del Libro.

A diferencia de la fábula de Bradbury, en la que cada persona aprendía un libro completo, el Proyecto Personas-libro, no exige más que asimilar un fragmento a la libre elección de las personas.

Esta propuesta llega al edificio de la avenida del Ferrocarril después de varios años de desarrollo a través del proyecto Farenheit 451 o proyecto Personas Libro, que de ambas formas de denomina, y el método de la palabra vinculada, desarrollado por el actor y profesor Antonio Rodríguez Menéndez.

El impulsor de este movimiento, que ya ha empezado a aplicarse en otros países, explicó que la idea surgió en su trabajo teatral. «Veía que la mayoría de los actores tenían una pronunciación perfecta pero no llegaban al sentido del texto», lo que le llevó a fijarse en que «hay que mejorar la forma de leer y de hablar en España».

La palabra vinculada consiste en establecer una relación con el texto que se lee, «vincularnos a quienes leemos, las personas que nos escuchan y al hecho mismo de hablar y de leer».

De esta forma se enfoca el acto de hablar, «como una forma de encontrarnos unos a otros», y al mismo tiempo desarrollar «una comunicación acogedora y humana», insiste.

El proyecto se desarrolla en centros educativos y diferentes tipos de colectividades, pero al mismo tiempo está abierto a la participación individual de cualquier persona interesada.

De esta forma, desde la Biblioteca Pública se ha ofrecido la posibilidad de participar en la cita del 23 de abril a diferentes centros educativos, a los clubes de lectura vinculados con el centro y a otras personas susceptibles de sentirse atraídas por la propuesta.

Enfoques. Rodríguez aclara que en función del origen o el punto de interés que tenga cada grupo que participe en el proyecto de Personas Libro, «también hablamos de Jóvenes-libro, cuando son estudiantes; Libros-puente de cultura, cuando sus actividades se plasman en encuentros entre gentes de distintos países».

De esta forma, las reuniones para poner en práctica la palabra vinculada son bibliotecas vivientes, que en la provincia de Ciudad Real se empezó a aplicar a través de los profesores del antiguo Centro de Profesores de Valdepeñas, con lo que se formaron grupos activos de Personas-libro en los colegios de varios municipios que dieron lugar a tres encuentros en localidades de La Solana, Membrilla y San Carlos del Valle y ya ese está trabajando en los preparativos de la cuarta cita.