Plaza Mayor: Entre fuentes y palmeras

Rafael Cantero
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La plaza ciudadrealeña ha acogido fuentes como la dedicada a Hernán Pérez del Pulgar o la que fue conocida como la 'luminosa'. A inicios del siglo XX llegó a tener hasta palmeras

Plaza Mayor: Entre fuentes y palmeras

Las plazas mayores son, en la mayoría de los municipios, las principales plazas del callejero urbano de cada localidad. El concepto de plaza Mayor proviene de una ordenanza de los Reyes Católicos, de 1480, en la que se prevé explícitamente la creación de estos amplios espacios abiertos en los que se pudieran celebrar los correspondientes mercados y en los que se debía construir la casa consistorial del Ayuntamiento. Las plazas mayores acostumbran a ser los espacios más significativos y frecuentados de los conjuntos urbanos. Estos espacios en los que se celebraban los mercados también fueron utilizados para llevar a cabo diversos actos públicos y actividades lúdicas, como autos de fe, corridas de toros, ferias, etc. 

La plaza Mayor de Ciudad Real, que adquirió su forma actual sobre 1746, reinando Fernando VI, es el lugar más emblemático de la capital. Desde antiguo ha sido uno de los principales focos comerciales de la primitiva Ciudad Real. La plaza ha contado con cuatro entradas principales, dos bajo los arcos del edificio del antiguo Ayuntamiento y otras dos por las calles Mercado Viejo y María Cristina. A estas entradas habría que añadir dos accesos menores como eran las Casas de las Carnicerías (hoy pasaje de San Isidro) y un callejón que comunicaba la plaza Mayor con la calle Caballeros, que se correspondía con el actual pasaje comercial Alcor.

Históricamente, la plaza Mayor ha tenido una ornamentación de tipología dura, donde ha predominado el granito, cemento y hormigón, frente a la escasa o nula presencia de vegetación, por lo que siempre ha tenido una gran carestía de sombra. La preocupación por el adecentamiento ornamental de este espacio ha estado presente en las distintas corporaciones municipales que han regido el Consistorio. Han sido varias las fuentes ornamentales que han existido en la plaza Mayor, entre ellas la que se inauguró en julio de 1861 con motivo de la traída de las aguas a Ciudad Real. Se trataba de una artística fuente a especie de monumento en homenaje al ilustre hijo de esta capital Hernán Pérez del Pulgar. Esta fuente fue sustituida en 1961 por otra que se inauguró en el centro de la plaza. Tenía un diseño circular con iluminación interior y era conocida como la Fuente 'Luminosa'. En 1976 fue sustituida por el monumento en bronce, en homenaje a Alfonso X 'El Sabio', fundador de la ciudad, obra del escultor Joaquín García Donaire. En 1988 se remodeló la plaza como consecuencia de la construcción del parking subterráneo, y la escultura del rey 'Sabio' se instaló en un extremo de la plaza, próximo al pasaje Alcor, coronando la fuente que existe en la actualidad.

Plaza Mayor: Entre fuentes y palmeras
Plaza Mayor: Entre fuentes y palmeras - Foto: Rueda Villaverde
De la misma forma que la plaza Mayor ha ido cambiando de nombre a lo largo del tiempo, también ha sufrido modificaciones su ornamentación vegetal. Como se puede observar en la fotografía antigua, tomada en 1923, la plaza contaba en el primer tercio del siglo XX con unos bancos con respaldo, de fundición, colocados en fila a un lado y otro de la plaza. Entre los bancos se sembraron unas palmeras que llamaron la atención de los vecinos. Es curioso la presencia de palmeras en la plaza Mayor porque hasta este momento no había ninguna palmera en el viario de la ciudad. Posteriormente, estas palmeras fueron sustituidas por unos árboles de bola que estuvieron plantados en el interior de unos arriates que había en ambos lados de la plaza, hasta que tuvieron que ser trasplantados a otro lugar de la ciudad al construirse el aparcamiento subterráneo.