Antonio Herraiz

DESDE EL ALTO TAJO

Antonio Herraiz


Hay plancha

21/07/2023

El domingo se decide quién hace las tareas del hogar de la casa. Ya teníamos a Tezanos en la cocina y ahora Yolanda nos ha garantizado la plancha. Nos falta una buena lavadora para retirar todas las manchas que dejan las dos últimas semanas. La memoria tiende a ser siempre olvidadiza y el tópico es demasiado recurrente: "Ha sido la campaña más sucia de la historia de la democracia", como si todos los comicios anteriores hubieran sido un permanente Disneyland. Lo único cierto es que la porquería huele peor con el calor y por encima de 40 grados el aroma se ha hecho insoportable. No han sido suficientes ni esas pinzas que muchos utilizan con frecuencia cuando acuden a votar. Si esto dura dos días más, acabamos todos asfixiados por el ambiente fétido que han ido dejando. Los encargados de esparcir toneladas de estiércol siempre mirarán al contrario, incapaces de ponerse frente a ese espejo en el que se dejan al aire todas las vergüenzas. 
Desconfíen cuando les anuncien que esto se acaba. Todas las encuestas han echado el freno de mano y han empezado a ajustar los márgenes. Aunque desde el lunes no publican sondeos, se sigue preguntado al ciudadano, sólo para un consumo interno de los partidos del que privan al resto de actores principales de esta peli. Feijóo ha prometido que cambiará la Ley Electoral para que esté prohibido convocar elecciones en julio y en agosto. Y, a lo que parece razonable, habría que añadir una larga lista, como la de poder publicar encuestas serias hasta casi el momento de acudir a las urnas. Se estima que casi el 70% de los españoles tiene decidido su voto antes de que empiece una campaña electoral. Aun siendo una cifra amplia, lo que resta resulta relevante cuando los márgenes se estrechan. Sin mayoría absoluta a la vista, cualquier porcentaje, por mínimo que sea, puede dar un vuelco al panorama. 
De ahí que sea posible que nada concluya el domingo. El PP dependerá de Vox de forma directa o indirecta. La pregunta es a partir de qué resultado Abascal deberá dejar gobernar en solitario a Feijóo. Lo que no aguantaría ni la economía española ni muchas de las estructuras que, casi siempre, ruedan por inercia es un bloqueo prolongado que nos abocara a una repetición de las elecciones. Ese acuerdo se antoja necesario e imprescindible. La izquierda, especialmente la más radical, se echará a la calle, como ha hecho siempre que un Gobierno no le ha convenido, olvidando que hay partidos de corte parecido a Vox que dirigen países relevantes en Europa sin que hayan vuelto al medievo. El caso más cercano es el de Italia, pero también está el de Suecia, el de Polonia o el de Hungría, donde Viktor Orban lleva 12 años en el poder. Es evidente que son culturas políticas diferentes y tradiciones distintas, a lo que hay que añadir una realidad: en ningún país miembro de la Unión está un partido de corte abiertamente comunista como el que hemos tenido en España durante cuatro años; tampoco encontramos ninguno en el que una formación heredera de un grupo terrorista goce de tanto peso como el que ha tenido aquí Bildu. 
Es lo único por resolver. En función de los resultados, qué precio pone Vox para apoyar al PP. En el otro frente no hay ninguna duda y PSOE y Podemos (travestido en Sumar) volverán a pasear de la mano. ¿Verdad Yolanda? Claro que sí, Pedro. Y luego tocará lo más difícil: gobernar. Al que le toque tiene plancha por delante.