Medio millar de daimieleños quisieron tomarse las uvas 12 horas antes de lo habitual y bajo un sol radiante, aunque con temperaturas frías; un acto con el que Daimiel Televisión comenzó con la celebración por su vigésimo aniversario.
Fue una fiesta por todo lo alto, aunque doce horas antes de lo habitual, en la que hubo música ambientando la plaza por discoteca Isla Cocoa, el humor singular de dos jóvenes cómicos daimieleños, Villar Cousins; e incluso un flashmob dirigido por Rompehielos que hizo mover el cuerpo a ritmo de baile a varios de los allí presentes.
Con las bolsas de las uvas en sus manos y ataviados con diferentes gorros y collares festivos, los asistentes las fueron comiendo una a una hasta que la última campanada dio paso a los besos y abrazos con los que se felicitaban y deseaban lo mejor para el año ya en curso.
Las anécdotas vinieron de la mano de las campanadas que mantuvieron en vilo a los presentadores del evento, Rocío Gálvez y Ángel de la Osa, ya que cuando el reloj del Ayuntamiento marcaba las 12 en punto no había seguridad de que las campanadas fueran a sonar tal y como se había previsto. Pero finalmente el reloj dio las 12 campanadas, aunque «eso sí, a mayor velocidad de lo que solemos estar acostumbrados cuando las tomamos con el reloj de la Puerta del Sol», explicó Sergio Aguirre, miembro de Rompehielos minutos antes de que comenzara el flashmob.
Como colofón, Rocío Gálvez, impresionada por el éxito y la gran participación de la gente, deseó que «todos los daimieleños». Un deseo al que se sumó De la Osa, quien deseaba «que todo el mundo tenga trabajo para disfrutar de la vida -el cuál también ha defendido-el apoyo y promoción de lo nuestro, de lo que se hace en Daimiel». Bajo el ritmo de la música y en una lluvia de regalos y obsequios concluyó esta iniciativa curiosa para despedir 2014 a las 12 del mediodía, con la esperanza de «que siente precedente y se siga celebrando en años venideros», como así manifestaron muchos de los allí presentes.