Ayer se fue una de las voces que ha formado, sin duda, parte de la banda sonora de la vida de muchas personas. Rasgada, profunda, sentida... hizo memorables temas como With a little help from my friends, You can leave your hat on o You are so beautiful. Pero con lo que el cantante británico Joe Cocker no pudo es con la batalla contra el cáncer de pulmón y ayer falleció a los 70 años, según anunció su manager, Barrie Marshall, en un comunicado difundido por la discográfica Sony.
«John Robert Cocker, conocido por su familia, amigos, su comunidad y todos sus fans alrededor del mundo como Joe Cocker, falleció este 22 de diciembre, tras una dura batalla contra un cáncer de pulmón. Mr. Cocker tenía 70 años», señala textualmente el documento y continúa: «Su éxito internacional como cantante de rock y de blues comenzó en 1964 y continúa hasta hoy. Joe creó alrededor de 40 discos y giró por todo el mundo», trabajo por el que pasará a formar parte de la historia de la música.
Joe Cocker nació el 5 de mayo de 1944 en Sheffield, en el Reino Unido, donde vivió durante sus primeros 20 años y en la que participó en algunas pequeñas bandas desde que tenía 15 años. La primera de ellas se llamaba The Avengers (bajo el nombre artístico de Vance Arnold), seguida de Big Blues (1963) y The Grease Band (1966).
Su mayor éxito llegó con una versión innovadora de With a little help from my friends, extraída del disco Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band de The Beatles, en el que incorporaron al guitarrista principal de Led Zeppelin, Jimmy Page, encabezando durante una semana la lista de sencillos de Gran Bretaña en noviembre del año 68.
En 1969, con tan solo 25 años, participó en el mítico Festival de Woodstock, donde interpretó varias canciones, como Delta lady, Some things goin’ on, Let’s go get stoned y I shall be released, aunque fue precisamente la interpretación de la versión de los músicos de Liverpool la que pasará a la historia como una de las actuaciones más icónicas de aquel festival, con el que se definió a toda una generación de músicos. A este disco le siguió una infinita lista, en la que destacan Joe Cocker! (1969), Joe Cocker: something to say (1972), I can stand a little rain (1974), Jamaica say you will (1975), Stingray (1976), Sheffield steel (1982), Civilized man (1984), Unchain my heart (1987), One night of sin (1989), Across from midnight (1997), Respect yourself (2002), entre muchos otros, así como multitud de álbumes de directos o recopilatorios de sus mejores temas.
Los años 70 estuvieron marcados por los excesos de alcohol y drogas. «Había drogas por todas partes y me lancé sobre ellas. Y una vez que estás en esa espiral descendente, es muy difícil salir de allí. Me llevó años lograrlo», contó en alguna ocasión.
Su mujer, Pam Baker, le ayudó a cambiar de vida. «Me dejó claro que le gente me quería seguir escuchando cantar», aseguraba en una entrevista. A su regreso a los escenarios en los años 80 popularizó temas como When the night comes, N’Oubliez jamais y el dúo Up where we belong con Jennifer Warnes, por el que obtuvo un premio Grammy en 1983.
De acuerdo con el diario Yorkshire Post, el músico vivió sus últimos años en el Estado norteamericano de Colorado, donde vivía en un rancho junto a su esposa.
Cocker era considerado uno de los músicos de rock más destacados de su generación y, como todos los grandes artistas, deja un legado musical imborrable. Esa voz rasposa y su histriónico lenguaje corporal sobre el escenario son y serán únicos, aunque ya no se convierta en realidad ese nuevo álbum que había anunciado para este próximo año.