La derrota en el último segundo frente al Luna Tenerife sigue doliendo, y mucho, en el BM Alarcos, pero plantilla y cuerpo técnico son conscientes de que de poco sirve lamentarse de lo mal que se gestionaron los últimos minutos de un partido que se tenía controlado. Yel modo ideal de olvidar aquello y pasar página es compensar ese tropiezo con una victoria en el derbi de mañana sábado en Manzanares (18 horas).

El extremo Toni Fernández de Simón y el pivote José Javier Candeleda coincidieron ayer en admitir que este partido va a resultar muy duro, ante un adversario «con una primera línea pesada», pero ante la que «nosotros también tenemos nuestras bazas», advierte el pivote extremeño. «Lo hagas bien o mal, el deporte siempre te da la posibilidad de mejorar o empeorar lo que has hecho una semana después», recuerda el extremo, que admite que la del pasado sábado fue «una derrota muy dura de la que no sabremos si nos hemos repuesto hasta que no llegue el partido de Manzanares».

Lo que más fastidia a los jugadores alarquistas es que las dos derrotas del equipo se hayan encajado en casa, «donde no se debe perder nunca», aunque es obligado «hacer borrón y cuenta nueva», como reitera ‘Cande’, que apuesta por mantener la línea inmaculada del equipo como visitante, condición con la que ha ganados sus cuatro compromisos. «En Manzanares nos jugamos mucho, unos y otros, y ambos venimos de perder», resume Toni Fernández.