El Partido Popular de Castilla-La Mancha no quiere abrir la puerta a una posible presencia de Vox en la Mesa de las Cortes regionales, que quedarán constituidas el 22 de junio, y apela a la representación institucional que le corresponda según los votos obtenidos en los comicios autonómicos.
Así lo señaló el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, en una rueda de prensa previa a la reunión que celebró con los diputados regionales electos en la sede del partido en Toledo. «Entendemos que donde tenemos capacidad de obtener representación institucional, debemos respetarlo», detalló Núñez, que consideró que el PP tiene que tener una representación en los órganos legislativos de la Cámara autonómica «acorde al voto popular».
En las elecciones autonómicas, de los 33 diputados que conforman las Cortes, el PSOE obtuvo, 17, el PP, 12 y Vox, 4, por lo que si cada partido vota a sus candidatos para ocupar los respectivos puestos en la Mesa, Vox se quedaría sin representación. La Tribuna publicó el lunes 12 que para que la formación de Abascal forme parte de este órgano parlamentario, PSOEy PP deberían traspasar sus votos.
Además, Núñez aseguró que ya tiene decidido el organigrama del grupo parlamentario popular, pero primero tiene que ser conocido y validado por el Comité Ejecutivo del partido.