Fernando Lussón

COLABORACIÓN

Fernando Lussón

Periodista


Los otros debates

17/05/2023

En unas elecciones municipales y autonómicas pueden celebrarse tantos debates entre los candidatos de los principales partidos como se acuerden, aunque no son tan numerosos como debieran, porque son vistos como un factor de riesgo y todos tratan de minimizar daños. Son debates que tienen lugar en las televisiones públicas autonómicas en el caso de las elecciones regionales, y en los medios de comunicación privados en el de las municipales, y son en ellos dónde los ciudadanos pueden hacerse una mejor idea de las propuestas de sus representantes a la hora de intentar resolver sus problemas, la sanidad, la educación, la vivienda y el alquiler, los pisos turísticos, el transporte y la movilidad, la mejora de los barrios, la limpieza, la calidad de vida…

Por supuesto que también se abordan en ellos las cuestiones de ámbito nacional. Pesan sobre los comicios del 28-M las ideas del plebiscito sobre las políticas del Gobierno y sus alianzas con independentistas y populistas de las que hablan los dirigentes del PP, y  los efectos de la gestión económica de las crisis sucesivas a las que ha tenido que hacer frente el Gobierno de coalición, con la coda de la inclusión de 44 condenados por pertenencia a ETA en las listas de EH Bildu y la influencia que ese hecho pueda tener sobre la intención de votos hacia el PSOE, a pesar de que siete de ellos que fueron condenados por delitos de sangre ya han anunciado que no recogerán su acta de concejal en el caso de ser elegidos. La idea de que las elecciones del 28-M son unas primarias de las generales que se celebrarán a finales de año está acrisolada por las experiencias precedentes y sus resultados son muy significativos por cuanto los ciudadanos tiene muy reciente el sentido de su voto.

En lo que coinciden todos los candidatos en los debates es en ocultar su política de alianzas a pesar de que está meridianamente claro cómo actuarán en cuanto termine el recuento de los votos, y no hayan alcanzado una mayoría absoluta que cada vez está más difícil de lograr por el fraccionamiento político.  Todos afirman que salen a ganar y a gobernar sin ataduras a pesar de que saben que lo conseguirán en muy pocos sitios. Allí donde hay pactos de las fuerzas progresistas estos se mantendrán si la suma alcanza. Tampoco queda ninguna duda acerca de que los candidatos del PP pactarán con Vox si de esa forma logran recuperar poder territorial, como han reconocido dirigentes de Génova 13, dentro de su estrategia de "derogar el sanchismo", en la que coinciden con el partido de Santiago Abascal. La candidata que más cerca está de la mayoría absoluta es la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso pero depende de la fortaleza de Podemos en Madrid.

En muchas de las comunidades autónomas y ayuntamientos gobernados por el PSOE que se ponen en juego, la posibilidad de un cambio de color político se puede dilucidar por un puñado de votos, y si este se produce, la consecuencia serán los movimientos internos de consolidación o defenestración –a mayor o menor plazo- de vencedores y perdedores, aunque algún barón aún podrá disfrutar de una nueva oportunidad, en el ámbito del PP, en el que han tenido lugar renovaciones en los liderazgos regionales.

Los otros debates no se aíslan del ruido que generan los líderes nacionales, pero le ponen sordina y se acercan más a los problemas de los ciudadanos y a sus soluciones.