La Consejería de Fomento de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha tomado la decisión de efectuar una imposición de servicio hasta octubre de 2014 a Autocares Cid, con lo que esta empresa puertollanense dedicada al transporte de viajeros por autobús está obligada a mantener el servicio hasta esa fecha. Cabe recordar que el pasado 10 de octubre este compañía presentó ante el Registro de los Servicios Periféricos de la Consejería de Fomento en Ciudad Real una petición formal para abandonar cuatro de las seis líneas de transporte regular de viajeros que actualmente tiene en concesión.

Fuentes del departamento dirigido por la consejera Marta García de la Calzada consultadas por La Tribuna señalan que aunque la imposición de servicio se hace hasta octubre del próximo año, aplicando así los doce meses que marca la legislación actual, se buscará una «solución satisfactoria» antes de esa fecha con el objetivo de que esta compañía pueda dejar el servicio «lo antes posible». Para ello, desde la Consejería de Fomento se reunirán tanto con representantes de Autocares Cid como con los regidores de las siete localidades afectadas.

Estas cuatro líneas de transporte regular de viajeros que la compañía puertollanense tiene intención de abandonar son Cabezarrubias del Puerto-Hinojosas de Calatrava-Puertollano, Brazatortas-Puertollano, Calzada de Calatrava-Puertollano y Ballesteros de Calatrava-Ciudad Real. El motivo, tal y como explica a este diario el gerente de Autocares Cid, Ceferino Mozos, responde a la situación «ruinosa» en que se encuentran estos servicios, con unos ingresos medios diarios de 60 euros (20 euros en la línea de Cabezarrubias del Puerto, 20 euros en la de Brazatortas, 5 euros en la de Calzada de Calatrava y 15 euros en la de Ballesteros de Calatrava). Una cantidad que, según Mozos, «no sirven ni para cubrir costes».

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