La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha continúa dedicando sus esfuerzos a garantizar el consumo de agua en aquellas zonas que más están sufriendo los episodios de sequía. Una de ellas es la comarca de Campo de Montiel, donde algunas de sus poblaciones se abastecen del embalse de La Cabezuela, que a fecha de ayer tan solo acumulaba 3,8 hectómetros cúbicos de agua, lo que significa un siete por ciento de su capacidad total.
Aunque la situación no es del todo preocupante, el Gobierno regional ha elaborado en estos últimos meses varios estudios geofísicos para localizar agua en la zona cercana a la conducción con el fin de que la obra sea menor. Así lo afirma la directora de Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, Silvia Díaz del Fresno, quien señala que en la próxima semana se iniciará el expediente para llevar a cabo la puesta en marcha de uno de los pozos por la vía de urgencia para garantizar el agua de consumo humano en la comarca de Campo de Montiel. Unos trabajos, manifiesta, que estarán finalizados en aproximadamente un mes y que demuestran el interés y el esfuerzo del ejecutivo autonómico por combatir la sequía, ya que «se trabaja bajo una planificación con el objetivo de no quedarnos en ningún momento sin recursos».
Díaz del Fresno señala que el embalse de La Cabezuela se encuentra en una situación «mejor» que la registrada el pasado mes de noviembre, cuando el pantano solo tenía dos hectómetros cúbicos, lo que llevó a Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, organismo dependiente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, ha solicitar la conducción de agua desde el Puerto de Vallehermoso a La Cabezuela de 40.000 metros cúbicos (0,04 hectómetros cúbicos) cada seis meses para el mantenimiento y conservación de la infraestructura». Pero a pesar de que el Gobierno regional contaba con la autorización de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) para poder llevar a cabo ese trasvase, al final no hizo falta gracias a la llegada de las precipitaciones en el mes de diciembre. Así lo recuerda la directora de Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, quien señala que en los meses de enero y febrero «ha seguido entrando agua al embalse». «No se ha llegado al nivel de emergencia para utilizar el agua de Vallehermoso», enfatiza al tiempo que declara que de forma paralela se trabaja en otras alternativas.
Díaz del Fresno, en declaraciones a La Tribuna, recuerda además que tampoco fue necesario llevar a cabo la actuación de bombeo flotante, aunque «está a nuestra disposición, ya que el proveedor lo tiene reservado para cuando lo necesitemos», puntualiza.
Del embalse de La Cabezuela pueden captar agua doce pueblos. Son Albaladejo, Alcubillas, Almedina, Pozo de la Serna (aldea de Alhambra), Santa Cruz de los Cáñamos, Puebla del Príncipe, Cózar, Villamanrique, Villanueva de los Infantes, Torrenueva, Castellar de Santiago y Valdepeñas, localidad esta última que tiene también conexión con el embalse de Fresneda. Doce municipios que engloban una población de más de 42.800 habitantes.