Desde el Real Madrid han dado por cerrado el mercado de verano con las llegadas de Jude Bellingham, Fran García, Brahim Díaz y Joselu Mato, algo que llama la atención teniendo en cuenta que Karim Benzema, entre otros, ha dejado huérfana la parcela ofensiva. Sin embargo, «a grandes males, grandes remedios», piensan en el combinado de Chamartín, que, para paliar la posible carestía de goles sin un atacante de élite, podría pasar de su ya clásico 4-3-3 con Carlo Ancelotti a un 4-4-2 con mucha presencia en el centro del campo y dos 'falsos nueves' con Vinícius Júnior y Rodrygo Goes en la punta del ataque merengue.

El 4-4-2 no es un sistema desconocido para el entrenador italiano. Por momentos, su 4-3-3 ha mutado al mítico dibujo arraigado en Gran Bretaña cuando Fede Valverde hacía las veces de 'extremo mentiroso' por la derecha, con Benzema de delantero centro y con Vinícius en su demarcación habitual en el costado izquierdo.

Con el dorsal '9' vacío, lo que alimenta los rumores de un posible 'bombazo' en el mercado estival, el cuadro blanco cambiaría su esquema de juego habitual, poblando la medular con un pivote como Eduardo Camavinga (o Aurelién Tchouaméni), escudado a su derecha por Luka Modric y, algo más adelantados, Jude Bellingham y Valverde, dos futbolistas con capacidad de albergar muchísimo campo y de sumarse al ataque con facilidad.

Esos dos jugadores, dentro del 4-4-2, cobrarían un peso goleador superior al habitual. Sin un atacante central en su sistema titular, Ancelotti alinearía arriba a Vinícius y Rodrygo. Los dos brasileños aportarían mucha movilidad a una línea que no tendría un ariete al uso, fijo y con habilidad para fajarse con los defensores rivales. Esas ubicaciones flexibles de 'Vini' y Rodrygo generarían multitud de espacios que Bellingham, Valverde e incluso Modrid podrían ser capaces de aprovechar llegando desde atrás.

Alternativas

En ese nuevo plan de Ancelotti, Joselu tendría bastante importancia al ser el único delantero centro puro de la plantilla (sin contar a Álvaro Rodríguez). Cuando la primera opción no consiguiera los frutos deseados, el 4-4-2 podría convertirse rápidamente en un 4-3-3 con la presencia del punta madrileño y con los dos atacantes brasileños ocupando ambos extremos.

Al igual que Joselu, Brahim también se postula como una buena alternativa para dar descanso a Rodrygo y a Vinícius siempre que estos acumulen cierto número de encuentros. El ex del Milan podría actual escorado en banda derecha en un 4-3-3 o como segundo punta con movilidad en el 4-4-2. Su polivalencia le hace partir con cierta ventaja para ser protagonista dentro de las rotaciones del entrenador italiano.

Si el mercado de verano, como admite el Real Madrid, ya está cerrado y no experimenta ninguna sorpresa que tenga de por medio la presencia de Kylian Mbappé, el combinado de Chamartín tiene bastante claro que debe cambiar su dibujo para que los centrocampistas, ubicados en un 'cuadrado' en la medular, aporten los tantos que se pierden con las salidas de Benzema y Marco Asensio.