El Consistorio ultima un informe para bajar impuestos y tasas

M. L.
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El nuevo equipo de Gobierno trabaja para cumplir este compromiso electoral, por lo que trasladará el documento a los técnicos para que se pueda llevar a las ordenanzas de cara a 2024

Fachada de la Oficina de Recaudación del Ayuntamiento de Ciudad Real. - Foto: Tomás Fernández de Moya

Reducir la presión fiscal para que los vecinos paguen menos impuestos y tasas es uno de los «compromisos prioritarios» del nuevo equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Ciudad Real y en el cual el nuevo alcalde, Francisco Cañizares, aseguró que trabajarían «desde el minuto uno».

De hecho, el nuevo concejal de Hacienda, Guillermo Arroyo, afirmó a La Tribuna que ya están manos a la obra, puesto que están «ultimando un documento» que trasladarán al personal técnico municipal para determinar burocráticamente cómo es posible llevar a cabo la rebaja que plantean y que afectará tanto a algunos impuestos como a tasas.

«Sobre todo, lo que queremos es que realmente el ciudadano note una bajada de impuestos, una bajada real, que no sea bajar por bajar y que al final pague lo mismo, no, es bajarlo de forma real», dijo, poniendo de relieve que para ello se tendrán en cuenta aspectos como la base imponible, el tipo y otros conceptos que pueden afectar a los tributos, de manera que el objetivo es que los vecinos vean un ahorro efectivo en sus bolsillos.

Arroyo se refirió a esta cuestión teniendo en cuenta que en los últimos años del gobierno de la coalición de PSOE y Cs hubo unas bajadas del tipo impositivo del IBI, pero una revisión «al alza» de los valores catastrales, de manera que en el cómputo total del recibo los vecinos pagaban más o lo mismo que en años anteriores.

Arroyo recordó también el compromiso de Francisco Cañizares de plantear al Catastro una revisión «a la baja» de valores catastrales que puedan estar sobredimensionados, lo que a su vez reduciría más el recibo de la contribución. Se trata de aspectos que el nuevo Ejecutivo quiere plantear «cuanto antes» y que deberán ser aprobados en las ordenanzas y presupuestos del año que viene, por lo que no serían efectivas hasta 2024, dado que las de 2023 ya están en vigor.

en el pacto con VOX. A su vez, hay que recordar que la bajada de la presión fiscal es uno de los principales asuntos que se contempla en el pacto firmado entre el PP y Vox para gobernar en la capital. En concreto, se recoge en el punto seis, que menciona «una bajada de tasas e impuestos. Reducción del IBI y de tasas».

Se trata, de hecho, de una de las cuestiones que también ha venido defendiendo Vox, que apuntaba a que éste era un punto en común con el PP. En el programa de estos últimos se recordaba a los vecinos que pagan «el cuarto IBI más caro de España y tributamos por vehículos, obras y plusvalías al máximo», lo que le reportó al Ayuntamiento en 2022 una recaudación de 26 millones de euros.