Los días de verano van pasando en el calendario y, con ellos, se acercan los comicios del 23-J que, a finales de esta semana, entrarán en una fase decisiva, la de la campaña electoral propiamente dicha, aunque estos días previos sean una extensión de la misma.
En este contexto, medir cómo va la carrera hacia las urnas toma una mayor importancia, ya que la foto va cambiando según se acerca el día definitivo de las votaciones. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, convocó en una extraña fecha estos comicios, justo después de la debacle socialista en las municipales y autonómicas del pasado 28 de mayo. Entonces el viento soplaba a favor del PP y esa convocatoria tan temprana, con la que el Gobierno anticipaba el final de la legislatura, solo podía entenderse como un torniquete para un PSOE que se iba desangrando y que no lograría acabar con vida el año si no se votaba hasta diciembre.
Y parece que poco a poco esa lectura inicial de lo que podría suceder se va cumpliendo, aunque aún deja lejos a Sánchez de revalidar su estancia en la Moncloa.
Ayer fue día de encuestas y diferentes medios nacionales publicaron unos sondeos que confirmarían esa tendencia, ya que el PP y Vox conservarían la mayoría absoluta, aunque podrían tener ciertas dificultades y perderían varios escaños tras sus pactos autonómicos, mientras que el bloque de la izquierda frenaría la caída.
Según el sondeo de NC Report para La Razón, los populares sacan más de 13 escaños al tándem PSOE-Sumar tras los acuerdos de Gobierno en las regiones con Vox. Esto supondría una pérdida de dos escaños. En el otro lado del ring, los socialistas podrían superar los 100 representantes. Así las cosas, los populares seguirían, no obstante, ganando las elecciones con 143-145 diputados, dos escaños menos que lo publicado en los sondeos la semana pasada, y Vox obtendría entre 37-39 escaños.
El PSOE podría superar la barrera simbólica del centenar al moverse entre los 99 y los 101 asientos y Sumar entre 31 y 33.
El barómetro de 40dB para El País y la Cadena Ser apunta también a un retroceso del bloque de la derecha que le podría costar incluso la mayoría absoluta.
De acuerdo con este sondeo, los de Génova habrían perdido 11 butacas en el Hemiciclo de la carrera de San Jerónimo en solo dos semanas -ganaría las elecciones con el 30,9 por ciento de los votos y obtendría 125 diputados-, mientras que Vox mejoraría su expectativa de voto en más de un punto y obtendría 43.
El PSOE, en cambio, recuperaría más de un punto hasta el 28,7 por ciento de los votos y 111 escaños y Sumar se mantendría como cuarta fuerza política con el 12,8 por ciento en intención de voto y 35 asientos en el Congreso.
En la encuesta electoral de GAD3 para ABC sería Vox el más afectado por los pactos territoriales y pondría en riesgo la mayoría absoluta al quedarse con el 11,5 por ciento de los votos y entre 25 y 39 escaños.
El PP ganaría las elecciones, según este medio, con el 36,6 por ciento de los apoyos y entre 150 y 154 escaños, el PSOE obtendría el 28,4 por ciento y entre 107 y 111 diputados y Sumar daría el sorpasso y sería en este sondeo la tercera fuerza con el 12,64 por ciento y entre 30 y 34 asientos, con lo que el bloque de la izquierda se acercaría a los 175, siempre que también rubricara un acuerdo con la presencia de fuerzas independentistas.
El último sondeo que se conoció la jornada de ayer fue el que realizó la empresa IMOP-INSIGHTS para El Confidencial. En este caso también mantiene al Partido Popular como la fuerza más votada el próximo 23-J, con una estimación del 32,6 por ciento del voto y 132-135 escaños, y lograría la mayoría absoluta con Vox.
En segunda posición aparecería el PSOE (26,2 por ciento y entre 97 y 100 escaños), tercero quedaría Vox (15,3 por ciento y 44-47 escaños) y, en cuarta posición, estaría Sumar, con un 13,3 por ciento de los votos, que se traducirían en entre 35 y 37 escaños.