El debate sobre el homicidio de La Atalaya sigue en la calle

M. E.
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La mayoría de los ciudadrealeños encuestados por 'La Tribuna' empatizan con el modo de actuar del acusado, mientras que son pocos los que reconocen sus reservas a la espera de una investigación firme

El debate sobre el homicidio de La Atalaya sigue en la calle - Foto: Fotos Rueda Villaverde

La muerte de un hombre de 35 años víctima de varios disparos realizado por el propietario de una finca de La Atalaya, a la que presuntamente había accedido forzando la entrada para cometer un robo, es un suceso que sigue estando en boca de muchos ciudadrealeños y que ha generado un intenso debate moral sobre el grado de justificación que tuvo el modo de reaccionar del ahora acusado y detenido, un hombre de 77 años, para quien la jueza encargada del caso decretaba prisión provisional y sin fianza. La Tribuna ha salido a la calle para preguntar lo que todo aquel que fue conocedor de este suceso seguro que ya se ha cuestionado internamente: ¿Está justificada la reacción del propietario de la finca? ¿Qué hubiera hecho usted en una situación similar? ¿Debería quedar el encausado en libertad?

La mayoría de los encuestados se ponen en la piel del acusado, aunque muchos de ellos prefieren esconder sus férreos argumentos detrás del anonimato. A otros no les importa dar la cara para empatizar con este hombre, considerando injusto no solo que se encuentre en la actualidad en prisión provisional, sino que pueda acabar en la cárcel tras la celebración del juicio. Otros guardan muchas más reservas, los que menos, y recuerdan que matar a una persona es un delito muy grave y que deberá ser un juez el que, después de una minuciosa investigación, decida si el encausado debe ser condenado o puesto en libertad.

Eugenio Alarcón y Lali Díaz Pintado son dos jubilados que afirman tener claro que ellos hubieran reaccionado igual que el dueño de la propiedad. «Si entran en su casa a robar, tendrá que defenderse. Si no llega a disparar a lo mejor le hubieran matado a él», defiende el primero, mientras que la segunda también cree que «este hombre hizo muy bien, porque si entran en mi casa para robar yo también me hubiera defendido».

Por su parte, María Marmolejos recuerda que «es una persona mayor a la que podían haber matado. Debería quedar en libertad».

Valentín Ortega es un estudiante que también opina que el autor de los disparos «debería quedar en libertad», porque no hizo otra cosa que «defender su integridad, la de su familia y su patrimonio».

Sólo dos de los encuestados se mostraban partidarios de esperar a que la instrucción del caso arroje luz sobre lo sucedido. «Ha matado a una persona y eso es un delito. Los jueces decidirán si fue en defensa propia o no», afirma Juliana Galán. «Creo que a todos los ciudadanos se nos debe juzgar por igual, apostilla Rosa Yunta. 

 

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