Dar respuesta a los retos sociales actuales, la mejora de la calidad de vida y empoderamiento de las personas beneficiarias, o la confección de redes locales de colaboración son algunos de los logros obtenidos por distintas iniciativas, y por los que han sido reconocidas en los Premios a la Innovación Social que concedió este jueves en Madrid la Obra Social “la Caixa”.
En su quinta edición, la Fundación “la Caixa” ha reconocido a 10 entidades sociales por su apuesta por la innovación social, ya que “sigue habiendo muchas desigualdades, y la sociedad necesita que hagamos cosas para que esto mejore, y de una manera tradicional no pasa, por lo que es necesario ir pensando en nuevas cosas que nos ayuden a que esto sea una realidad”, dijo Marc Simón, subdirector de la Fundación.
El CaixaForum de Madrid acogió en la tarde de ayer el acto de entrega de estos diez galardones y un accésit, que estuvo presidido por la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, el director general de la Fundación Bancaria “la Caixa”, Jaume Giró, y el subdirector, quien identificó entre los proyectos ganadores una “base comunitaria”, es decir, que “impacta en el territorio haciendo que la sociedad tenga un papel importante”.
También el empoderamiento de las personas a las que se ayuda, teniendo en cuenta que en muchos casos está en su propia persona la solución a los problemas, o que no hay soluciones globales, por lo que la atención individualizada en cada persona y sus propias circunstancias están en la base del éxito de estos proyectos. Y es que en la filosofía de estos premios está la innovación como forma de transformar y mejorar los problemas huyendo del enfoque asistencial.
Retos del día a día. Es el caso del Alojamiento Alternativo Puente, de las Hijas de la Caridad San Vicente de Paül de Zaragoza, donde proporcionan una vivienda temporal a personas en situación de vulnerabilidad social. “Nos centramos en las personas” cuenta Nieves García, responsable de esta iniciativa, que utiliza el acompañamiento individualizado basado en “escuchar a las personas” porque cada una de ellas tiene unas expectativas, unas necesidades y unas capacidades diferentes. “Hacemos un acompañamiento hacia la autonomía” de estas personas, resume.
También para José Luis Rico, director de la Asociación madrileña de Amigos y Familiares de personas con esquizofrenia de Madrid (Amafe), que con sus programas del Centro de Día buscan “una mayor autonomía del enfermo, una mayor integración social, y un aumento de la calidad de vida evitando su aislamiento y potenciando la interrelación social