El Balonmano Alarcos visita este sábado (19 horas) al Ibiza en un partido que puede ser muy importante en su camino hacia la permanencia. Y es que en el caso de vencer, el conjunto entrenado por Isidre Pérez condenaría a esa misma pelea al conjunto balear, con el que habría obtenido los 4 puntos, que arrastraría a esa segunda fase por la salvación.

Tras competir y dar la cara en el último encuentro con el Alicante, pero cosechar una nueva derrota, la plantilla se ha conjurado para mejorar en esos aspectos que le están faltando para terminar de sacar adelante los encuentros. Especialmente en la gestión de los últimos minutos de los encuentros, donde la inexperiencia se está traduciendo en imprecisiones y ansiedad.

En principio, Rolando Urios será la única baja de un equipo que viajará en el mismo día para afrontar un choque que el club local ha trasladado al pabellón Es Pratet, de aforo más reducido. "Este partido es una final", admite Isidre Pérez. "Es un encuentro fundamental y está en nuestras manos ganar", continuó el alicantino, para el que las claves del encuentro van a ser "la valentía, templanza y saber estar. Hay que saber competir en los momentos y situaciones críticas".

"Estamos con muchas ganas de hacerlo bien porque ya nos merecemos una alegría. Nosotros y la afición, sobre todo ellos, ya lo merecemos. Va a ser una guerra y ahí ganan los soldados más valientes. La cuestión mental es fundamental, incluso por encima de lo táctico", concluyó Pérez.

Para terminar la primera fase al Alarcos le queda recibir al Barça Atlètic, ya clasificado para la fase por el ascenso, de ahí que esos puntos ya no tendrían trascendencia para la siguiente ronda.