El Villarrubia no pasó del empate ante el segundo clasificado, el Illescas. Carlos García adelantó al equipo blanquiazul a los veinte minutos de partido y el Illescas ponía la igualada pasada la hora de partido por medio de Molina. Un punto, en definitiva, que supo a poco, pero que pudo ser peor ya que el equipo sagreño estampó dos balones en el palo y en el larguero respectivamente.

Al finalizar el partido, Miguel Aroca, técnico del Villarrubia, en declaraciones facilitadas por el club,  hacía crítica de lo negativo y trataba de quedarse con lo positivo. "Nos queda un sabor malo porque sabemos que ahora no estamos bien, no estamos teniendo esa fortuna. Es un empate muy trabajado y nos quedamos con eso. Ahora toca hacerlo bueno la semana que viene, pero está claro que estamos en un momento complicado como nos pasó en la primera vuelta. Solo queda trabajar e intentar seguir. Quedan nueve partidos y tenemos que mejorar para lograr el mayor número de puntos posibles", explicaba el técnico blanquiazul.

Repasando el partido, el preparador de Villarrobledo comentaba que "en la primera parte ajustamos la presión y no le dejamos tocar al rival. En la segunda parte, los cambios nos tuvieron que haber dado frescura, pero no fue así. El partido estaba intenso para salir concentrado desde el inicio, aunque es cierto que para ser el Illescas, tampoco nos crearon demasiado peligro, pero en un centro lateral, llegó el gol".

Por último, reconocía que "cuando no ganas, estás jodido porque sabemos que el fútbol es resultadista. Los chicos están haciendo un gran trabajo y creo que hemos dejado una buena imagen. No queda otra que seguir trabajando".

Mientras tanto, el Villarrubia regresará al trabajo el próximo lunes para preparar el próximo encuentro ante el Tarancón.