El BM Alarcos cerró el sábado un ciclo. No lo hizo solo por disputar su último partido en Plata, que saldaba con victoria clara ante Amenabar (35-26), sino porque muchos de sus jugadores eran conscientes de que sus futuros se iban a separar desde ese momento. Jugadores que han formado un gran grupo humano, en una temporada dura, que da paso ahora a una nueva etapa en el club, con su primer equipo en Primera.

La emoción, los abrazos, las lágrimas y las fotos para el recuerdo inundaron la pista del Quijote Arena tras la finalización del partido. Y uno de los hombres más afectados fue el capitán, 'Jota' Serrano, que rompía a llorar cuando la peña La Batalla le entregaba el premio a la regularidad, le coreaba el clásico «¡'Jota', Quédate!» y sus compañeros le manteaban. «Ha sido una temporada muy larga, con muchos contratiempos y derrotas, y era importante despedirnos con esta victoria en casa ante la familia y la afición, que nunca nos han fallado. Era importante despedirnos de esta manera de Plata», decía el ciudadrealeño, visiblemente afectado emocionalmente, que destacaba el «grupo humano increíble» que se ha formado este curso en el vestuario.

Sobre su futuro, no precisaba si seguirá defendiendo el escudo alarquista en Primera, aunque de sus palabras se podía intuir que la posibilidad de dejar el club es importante: «En un futuro seguiremos luchando y creciendo hasta que acabe la carrera deportiva. Van a ser semanas de pensar, recapacitar y dar vueltas a las situaciones deportivas y personales, para tomar una decisión, pero aún no hay nada cerrado».