Agentes de la Policía Local en coordinación con la Nacional están en alerta, muy vigilantes en el centro de la ciudad sin descuidar otras zonas para evitar atentados, hurtos y robos y prevenir nuevos contagios.

Están aplicando tres acuerdos, uno de ellos adoptado en la Junta Local de Seguridad sobre comercio seguro para evitar hurtos (se han detenido a varias personas), y luego hay otras dos actuaciones más importantes: la primera de protección antiterrorista porque estamos en alerta 4 (decretada por el Ministerio del Interior), riesgo alto, que implica la instalación de bloqueos y controlar las grandes superficies y los tramos peatonales para evitar el paso a vehículos rodados que pudieran ser utilizados como arma de atropello, y la segunda (dictada por la Consejería de Sanidad) para la protección frente al contagio del COVID-19.

Los agentes de la Policía Local llegan, bloquean las calles con sus vehículos y patrullan a pie desde la Catedral a San Pedro, incluidas las plazas del Pilar y Mayor y todas las calles trasversales y adyacentes con el propósito de prevenir posibles atentados terroristas y también para velar por el cumplimiento de las medidas restrictivas decretadas por Sanidad, sobre todo el aforo de los establecimientos comerciales, incluidas las grandes superficies alejadas del centro. Ayer tarde desalojaron varias tiendas por no respetar las restricciones de aforo. Generalmente lo hace, pero hay veces que no es así, indican a este diario fuentes policiales.

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