Bermejo descubre con su objetivo Malamoneda

A. Criado
-

La Biblioteca de Castilla-La Mancha, en el Alcázar de Toledo, acoge hasta el 6 de junio una exposición fotográfica sobre este enclave declarado BIC en abril de 2007

Francisco Bermejo, vecino de Horcajo de los Montes, expone estos días en la Biblioteca de Castilla-La Mancha, ubicada en el Alcázar de Toledo, instantáneas sobre el despoblado de Malamoneda (Hontanar, Toledo), enclave declarado Bien de Interés Cultural el 14 de abril de 2007 con la categoría de Zona Arqueológica.

«Se trata de uno de esos lugares prácticamente desconocidos, incluso en la propia comarca en la que se ubica, Los Montes de Toledo, con un gran potencial turístico pero todavía sin explotar», explica el autor de la muestra, que hace hincapié en que es un punto estratégico desde la prehistoria, abarca restos de la cultura celta, romana, musulmana, visigoda y fue lugar de asentamiento de los Templarios y Jerónimos, despoblándose a finales del siglo XIX.

La inauguración de la exposición, realizada en la sala de conferencias de la Biblioteca de Castilla-La Mancha el pasado 18 de mayo, contó con la presencia de destacadas personalidades de la vida cultural toledana y el apoyo del director del centro, la Asociación Cultural Montes de Toledo y el Ayuntamiento de Hontanar, así como con la colaboración del Ejército del Aire, que ha cedido material cartográfico para su reproducción en la muestra.

La presentación corrió a cargo de Julio Porres de Mateo y Ventura Leblic García, miembros de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo, siendo este último autor del libro El despoblado de Malamoneda, fruto de sus más de 40 años de investigación sobre la zona arqueológica.

Descubre Malamoneda permanecerá en la Biblioteca del Alcázar de Toledo hasta el 6 de junio y se estima que en el periodo de exposición será visitada por más de 10.000 personas. La muestra, de carácter itinerante, se trasladará durante varios meses a distintas entidades públicas y privadas de las provincias de Ciudad Real y Toledo.

Las instantáneas expuestas se demarcan del carácter meramente documental que está asociada con este tipo de fotografía, profundizando en su vertiente más artística, influenciada por el paisajismo. El autor ha empleado todo tipo de focales, desde objetivos gran angular hasta objetivos de retrato, utilizando tanto ópticas fijas como zooms. Asimismo, huyendo de las típicas técnicas de retoque digital y para dar más autenticidad a las tomas capturadas, Bermejo ha utilizado filtros físicos como el degradado neutro, el polarizador y el infrarrojo, realizando tomas nocturnas de algunas edificaciones tanto de corta como larga exposición sin procesado posterior digital, durante los nueve años en los que ha visitado en diversas ocasiones la zona arqueológica de Malamoneda.