Atención temprana para 'vivir la vida'

Hilario L. Muñoz
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Aspacecire, que cuenta con uno de los centros de atención temprana más grandes de la provincia, reivindica hoy que el servicio sea universal

Una de las intervenciones en el centro de Atención Temprana de Aspacecire. - Foto: Rueda Villaverde

Con 175 menores y 10 profesionales, la Asociación de Parálisis Cerebral de Ciudad Real (Aspacecire) gestiona en la capital el segundo centro de atención temprana de los 19 que hay en la provincia. Hoy se celebra el día de la Parálisis cerebral y se ha decidido que la jornada se dedique a estos recursos la jornada, tanto, por el papel que juegan en los bebés que nacen con parálisis cerebral, uno de cada 500 aproximadamente, como para todos los que lo necesiten por diversos motivos, ya que la atención temprana mejora la vida de los menores, y la importancia que tiene para que en el futuro puedan 'Vivir la Vida', como dice el lema de esta jornada. 

De manera gráfica, la coordinadora del centro, María Sierra del Prado, indicó que se puede atender a niños que, por ejemplo,no levantan la cabeza con seis meses o que no gateen al año, así como los menores con cualquier alteración al desarrollo y que son derivados por algún especialista. Ella, psicóloga, cuenta con un equipo en el que hay fisioterapeutas, logopedas, psicoterapeutas y que trabajan en un centro, con financiación del Gobierno regional. 

«Nuestro enfoque es el de centrarnos en las familias», indicó, esto implica que parte del trabajo no se desarrolla en el centro, sino en las casas o escuelas infantiles, de tal modo que la clase de una hora semanal, se transforme en una actividad que se desarrolle todos los días y a todas horas. «Las familias pasan siempre a las sesiones de trabajo» y se busca, además «trabajar en los contextos naturales», apuntó. De hecho, incluso, se trabaja con los colegios, coordinando con los orientadores, cuando necesitan este apoyo. 

Atención temprana para ‘vivir la vida’Atención temprana para ‘vivir la vida’ - Foto: Rueda VillaverdeUna clave del servicio es que no solo se trabaja en la rehabilitación, por grandes alteraciones, que «son muy poquitos», y se actúa, sobre todo, a nivel preventivo. Por hacer una idea del volumen, el mayor centro es el de AFAS Tomelloso, con 242 plazas, y solo en el último trimestre se atendieron a 2.023 menores en la red provincial, la gran mayoría, 1.792 menores de tres años. En este sentido es clave un concepto, la plasticidad neuronal y es que los bebés cuando nacen son muy moldeables, «su cerebro aún no está formado». «De ahí la importancia, de invertir en este tipo de recursos», indicó la coordinadora, porque si se atienden ciertas dificultades del desarrollo, en su momento, se trabaja en «lo preventivo», se evita que acabe su alteración en una dificultad mayor, lo que implica destinar más recursos en colegios u hospitales. Muchos niños tras dos o tres años «consiguen la normalización educativa y el alta», tras alcanzarse unos objetivos que fija el centro de atención temprana y que se revisan cada seis meses. En los últimos tres meses se han dado 187 altas en la provincia. 

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Atención temprana para ‘vivir la vida’
Atención temprana para ‘vivir la vida’ - Foto: Rueda Villaverde
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Atención temprana para ‘vivir la vida’ - Foto: Rueda Villaverde

En esa prevención está Sandra Garzón, una vecina de Porzuna, ya que el centro da servicio a la capital y la comarca de Los Montes, que ha estado con sus dos hijos en atención temprana. «Se nota mucho porque los profesionales tienen otras pautas que nosotros no tenemos. Te van explicando que cada niño lleva su tiempo, su paso, y nos dan a nosotros ejercicios para que hagamos en casa», explicó. Lo mismo es el caso de María Gema García. En el caso de Alba Baeza, a su hija «le daba mucho miedo ponerse a caminar» y ahora ya «es una cabrilla, se sube a todos lados», gracias al trabajo en el aula y en casa.