La Policía Local de Ciudad Real ha informado de la detención, sobre las 5.30 horas de la madrugada del sábado, de un conductor que circulaba de un modo irregular y que pretendía eludir la vigilancia de las patrullas en la zona del Torreón, intentando aparcar el coche cuando veía algún agente. Tras ser interceptado, se negó a realizar la prueba de alcoholemia, dañando además un etilómetro. Así, quedaba detenido e irá a juicio por conducir ebrio, negarse a someterse a la prueba de detección alcohólica y por delito de daños.
Antes, sobre las 4:20 horas y en la calle Libertad, una patrulla detectó la circulación irregular de otro vehículo y su conductor arrojó resultado positivo en alcohol de 0,77 mg/L, por lo que del mismo modo irá a juicio por delito contra la seguridad vial. El vehículo quedaba inmovilizado.