El Ayuntamiento de Ciudad Real ha dado continuidad a un acuerdo alcanzado en la pasada legislatura entre PSOE y Ganemos por el que el Consistorio asume la subida del IPC en el recibo del agua. Esto implica una reducción de la cuota fija por este servicio en 0,6627 euros, que es la subida que hubiera correspondido con el IPC del año pasado del 5,7 por ciento. Esto deja la cuota fija en 12,84 euros por trimestre, de 7,96 euros en el caso de familias numerosas o por renta, las mismas tarifas del año pasado. El punto fue aprobado por los votos de PSOE y CS, a los que se sumó Unidas Podemos.
Además, en este Pleno se ha modificado el Impuesto sobre el Valor de los Terrenos, reduciendo los coeficientes fijados, en el margen que ha permitido la ley, y que afecta a las viviendas que se hayan vendido o heredado desde el 1 de enero de este año. PSOE y Cs sacaron adelante este cambio de la ordenanza con la abstención de la oposición y un debate entre socialistas y 'populares' a cuenta del futuro de los impuestos municipales, con la cercanía de las elecciones.
"Tenemos el gravamen más alto", dijo el edil del PP Miguel Ángel Poveda, quien señaló que el Ayuntamiento no ha bajado impuestos, ya que, aunque se toque el coeficiente, los vecinos no notan en su bolsillo esa reducción y señaló el caso del IBI, que se encuentra en unos ingresos de 26 millones, siete más que cuando llegó el PSOE al Consistorio. "Ustedes engañan con que bajan el tipo y el recibo sube", dijo Poveda, acusando al Consistorio de no haber querido escuchar a la oposición en estos cuatro años y mientras han hecho que el Ayuntamiento funcione "como un organismo" que recauda con "la pretendida intención de hacer cosas"; cuando el PP ve en el Consistorio "un agente impulsor de la ciudad" y, por lo tanto, el objetivo es que los vecinos tengan dinero, puede ayudar a mejorar la economía de la ciudad.
"Siempre aplicamos lo más beneficioso para los contribuyentes", respondió el edil de Hacienda, Nicolás Clavero, recordando que esta modificación y la que se hizo el año pasado ha implicado un ahorro de entre 800.000 y un millón de euros a los vecinos. "Cuando el PP está en la oposición, propugna bajar los impuestos y luego lo suben", señaló Clavero, recordando la subida de 2012 de los tipos, y la bajada paulatina desde entonces.