El Vestas Alarcos está viviendo una semana muy especial. Y no sólo por el hecho de no poder estar entrenando en el Quijote Arena, sino por el partido que le espera este domingo en Zamora, correspondiente a la primera eliminatoria de la Copa del Rey (12.30 horas. Pabellón Ángel Nieto). 

El premio para el ganador será recibir a un conjunto de la Liga Asobal en la segunda ronda, una experiencia que ya vivió el conjunto ciudadrealeño ante Huesca (2015-16), Bidasoa (2018-19) y Sinfín (2019-20) y que ahora desea repetir.

Álex Plaza, uno de los canteranos del equipo, admite las ganas que hay en la plantilla de seguir vivos en este torneo, aunque para evitar dosis excesivas de presión «nos lo tomamos como un partido más de Liga. Estamos trabajando muy duro estas semanas porque este torneo no se juega todos los días».

«Esta temporada cada partido es una batalla y hay que dar el 200% de nosotros», continuó Plaza, que afirmó sentirse más cómodo jugando de central, pero que está a disposición del técnico «para donde él crea oportuno que yo pueda aportar más».

Jesús Herrero, entrenador del equipo, tendrá a toda la plantilla a su disposición y vaticinó «un partido duro, donde la clave será imponer nuestro estilo. Cuando uno se pone esta camiseta y este escudo es para darlo todo y ganar y estamos con toda la ilusión del mundo de seguir vivos en este torneo y poder jugar ante un conjunto de Liga Asobal».