El IPC desbocado: escala a su tasa más alta en una década

R. Ch.
-

La tasa interanual está ya en el 4,1%, con una factura de la electricidad crece un 28% en el último año

El IPC desbocado: escala a su tasa más alta en una década - Foto: RUEDA VILLAVERDE

El incremento del precio de la luz, a la espera del efecto que puedan tener las medidas que anunciaba ayer el Gobierno de Pedro Sánchez, ha elevado la inflación en la provincia hasta datos del año 2011, con una tasa interanual del 4,1 por ciento. Eso es, los precios han subido en el último año a un ritmo como no lo hacían en una década. Una inflación que se dispara empujada por el coste de la electricidad que en el conjunto del país se ha encarecido casi un 35% para los consumidores en 12 meses. En el ámbito provincial, aunque el Instituto Nacional de Estadística no permite escudriñar hasta ese detalle el peso que ha tenido la factura de la luz en el encarecimiento del coste de la vida en los hogares, sí lo incluye en la cesta de la compra dentro del epígrafe de electricidad, gas y otros combustibles. Ese capítulo, comparado con 2020, es ahora un 28 por ciento más caro este 2021. Para hacerse una idea de cómo ha crecido, el siguiente componente de esa lista de la compra que más aumenta su precio es el de uso de vehículos especiales, y lo hace menos de la mitad, el 12 por ciento.

El propio INE reconoce el problema. El primer grupo que destaca por su influencia en el incremento de la tasa anual es el de la vivienda, cuya variación anual se sitúa en el 11,5%, más de dos puntos por encima de la registrada el mes pasado, a consecuencia del aumento de los precios de la electricidad, mayor este mes que en agosto de 2020. En la provincia, ese capítulo crece en 12 meses más del 15 por ciento, con un indicador que allá por el mes de febrero era negativo, esto es, reflejaba un descenso de precios en Ciudad Real antes de la reciente escalada del valor de la luz en el mercado mayorista que llega ya a los recibos de los consumidores domésticos.

Carburantes y alimentos.

Además de la electricidad, el IPC anota subidas también de precios del transporte, por la repercusión de los carburantes, que en 2020 eran más baratos; y los alimentos y bebidas no alcohólicas, debido a la subida de los precios de las frutas frente a la bajada del año pasado.

El IPC desbocado: escala a su tasa más alta en una década
El IPC desbocado: escala a su tasa más alta en una década
Los descensos de precios, que también los hubo, los lideran, hasta agosto, las rebajas en la compra de equipos de telefonía, de artículos para ocio o de equipos fotográficos y de los paquetes turísticos, que ajustaron a la baja sus precios en la recta final de la campaña estival con respecto al pasado año.