Cánticos al mes de mayo

LT
-

El Grupo Folclórico Airén reune a rondallas y coros de diferentes entidades musicales en la apertura de sus rondas. Mayores y pequeños rememoran la tradición de los mayos

Cánticos al mes de mayo

La Asociación Cultural Airén convocó a coros y rondallas de diferentes entidades musicales de Manzanares en la apertura de sus ‘Rondas y Cruces de Mayo 2019’. Ante la cruz de mayo, instalada en el patio del Centro Cultural Ciega de Manzanares, numerosos participantes de todas las edades interpretaron mayos y canciones de ronda que se repetirán a lo largo de todo el mes en la veintena de cruces repartidas por la localidad.

Aunque el grupo folk manzanareño ya realizó rondas a la Virgen el pasado 30 de abril en las parroquias y en el guardapasos de la Virgen de la Soledad, la puesta de largo de la edición 2019 de las Rondas y Cruces de Mayo de la Asociación Cultural Airén se realizó este jueves y resultó un éxito de convocatoria.

Tras las palabras de bienvenida a cargo de María Isabel Ruiz Hernández, del grupo Airén, la concejala de Cultura, Silvia Cebrián, agradeció la participación de todos los grupos y resaltó el trabajo de los componentes de la asociación organizadora «para que no se pierda esta tradición que forma parte de nuestra cultura y hay que mantener». También hubo un agradecimiento público a las hermandades, asociaciones, entidades y particulares que han instalado una veintena de cruces a las que ‘Airén’ cantará mayos durante todo este mes, además de hacer otro buen número de rondas a damas y a la Virgen.

En el Centro Cultural Ciega de Manzanares, todos los presentes cantaron conjuntamente un mayo dedicado a Nuestro Padre Jesús del Perdón y la Jota de Exaltación de Manzanares para abrir y cerrar, respectivamente, el acto. También hubo mayos o canciones de ronda a cargo del coro de la Escuela de Música, de la Agrupación Manuel de Falla y de la rondalla y coro del Centro de Mayores.

Con este tipo de actos, la asociación ha logrado mantener y potenciar la tradición de los mayos en Manzanares, labor de recuperación que hace décadas inició, entre otros, el recordado Ambrosio Sánchez-Ballesteros Serrano, impulsor también del grupo folclórico que dio lugar a Airén. Por ello, fue un acto muy especial para algunos de los participantes». Los he oído desde muy chiquitín y participo aunque solo sea por el recuerdo y porque se mantenga, porque vale la pena», declaró su hijo Ambrosio Sánchez-Ballesteros Ruiz.

Y gracias al impulso que Airén y diferentes asociaciones han sabido dar a esta tradición en Manzanares, ésta ya ha llegado y es conocida por los más pequeños, tal y como demostraron los niños y niñas de la Escuela de Música.