Con la legislatura municipal a punto de terminar, es habitual hacer balance y uno de ellos está relacionado con las sanciones impuestas por incumplimiento de la Ordenanza Municipal de Protección Ambiental (OMPA), documento que data del año 2000 aunque la cuantía de las sanciones fue modificada en 2016 por el Pleno de la Corporación municipal. De este modo, desde el 1 de enero de 2015 hasta el 30 de abril de este año se contabilizan casi 760 multas por incumplimientos de la citada ordenanza, de las cuales algo más de una de cada tres está relacionada con la tenencia de animales.
Según los datos aportados por el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Puertollano a este diario, en estos cuatro años y cuatro meses las sanciones por incumplimientos de la Ordenanza Municipal de Protección Ambiental alcanzaron la cifra de 758, de las cuales 253 fueron por tenencia de animales, ya sea por llevar perro sin microchip o sin censar, pasear perros de razas potencialmente peligrosas sin las medidas de seguridad requeridas (bozal), no recoger sus deposiciones en la vía pública o por causar molestias a los vecinos por los ladridos, principalmente. A éstas hay que sumar otras 24 sanciones por abandono y maltrato animal, siendo 2018 el año en que más se registraron por cuatro en el resto de años completos, mientras que en lo que va de 2019 ya se tienen contabilizadas tres.
Por su parte, las sanciones relativas al ruido ascienden a 109 en este periodo, mientras que las relacionadas con residuos y limpieza suman 97, principalmente por incumplir los horarios de deposición de basura en contenedores, vertidos incontrolados, pegar carteles sin autorización y hacer un mal uso de los contenedores de recogida selectiva. Por último, también se contabilizaron 11 sanciones por realizar fuegos en lugares prohibidos o fuera de las fechas autorizadas a tal efecto. El resto de multas, con hasta 275, son por otros motivos, como colocar contenedores de obra sin licencia, vehículos abandonados, miccionar en la calle, etcétera.
Según recoge la OMPA, las infracciones se dividen en leves, que conllevan multas de entre uno y 500 euros; graves, con multas de 501 hasta 1.000 euros, y muy graves, que llevan aparejadas multas de 1.001 hasta 3.000 euros.
Para el concejal de Medio Ambiente, Jardines e Imagen de la Ciudad, Carlos José García, «la disciplina ambiental es una de las competencias más importantes que desarrolla la Concejalía, en permanente colaboración con la Policía Local» y añade que «la protección del medio ambiente constituye una necesidad social y un derecho colectivo de los ciudadanos».