Cristóbal Colón, ¿toledano?

José García Cano
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A comienzos del siglo pasado, Ventura López propuso la descabellada teoría de que el insigne navegante era natural de la ciudad imperial y que era hijo del arcediano de Guadalajara, don Gutierre Álvarez de Toledo, hermano del Duque de Alba

Cristóbal Colón, ¿toledano?

Hace más de noventa años que don Ventura F. López publicó un pequeño opúsculo en el que aseguraba que el descubridor de las Américas era nada más y nada menos que de Toledo. En su trabajo, propone la descabellada teoría de que el insigne navegante era natural de la ciudad imperial y que era hijo del arcediano de Guadalajara, don Gutierre Álvarez de Toledo, hermano del Duque de Alba. Añade el autor que el verdadero nombre de Colón era Miguel Illán Fonte-Rosa, tomando el segundo apellido de la fuente que existía en el toledano Paseo de la Rosa y de la capilla de la Virgen de la Rosa que habría fundado el citado don Gutierre. Asumiendo don Ventura que necesitaba pruebas para confirmar tamaño despropósito, intenta en su trabajo argumentar con más datos esta historia. Para ello comienza recordando una canción del siglo XV de Gómez Manrique titulada ‘A una dama de Guadalajara’, en la que aparece un caballero que bien podría ser el citado don Gutierre y cuya dama guadalajareña era la madre de Colón, es decir ‘Rosa Fuente’, como asegura el autor. Por otro lado, la famosa Casa de las Cadenas en Toledo (ubicada en la calle de las Bulas) parecer ser que fue la casa solariega de la familia materna de nuestro Colón toledano, ya que en ella aparece repetidamente en sus escudos una rosa que identifica López con su emblema familiar. El apellido Lafuente lo poseyeron diversos nobles y canónigos de la catedral toledana. Nuestro autor se apoyará además en otras pruebas físicas que él visitará para corroborar su historia. Me refiero a las momias de la iglesia de San Román. Sabido es que el subsuelo y las criptas de la ciudad de Toledo cobijan decenas de momias que a lo largo del tiempo se han ido encontrando y sobre las que se han escrito algunas leyendas y crónicas que ofrecen diferentes puntos de vista de estos restos humanos de tantos y tantos toledanos. El caso es que Ventura F. López visitó las momias de la iglesia de San Román (hoy Museo de los Concilios) señalando que «allí están desde entonces en un número de treinta o cuarenta, hombres, mujeres y niños, arrumbados contra la pared, destacándose de todos la cabeza de uno en pie junto al rincón, de expresión tan dura su rostro que mete miedo…» Pues esta momia –según López- sería nada más y nada menos que la de Cristóbal Colón, el cual era «de aventajada talla». Las momias parecían ser de entre los siglos XV y XVI, datación deducida por su indumentaria. Además hay un libro de defunciones de San Román, donde aparece una partida de un tal «XPus Colo…» con fecha 1506, conjeturas que son tomadas por nuestro protagonista como pruebas fehacientes de que esa momia era la de Cristóbal Colón.
Termina concluyendo esta pequeña obra que este famoso navegante había nacido en Toledo entre 1435 y 1440 y que su nombre efectivamente era Miguel Illanno Fonterrosa, antes de tomar el de Cristóbal Colón, ya que le inspiraba el Espíritu Santo (Columba) y por ello cambió su nombre… Curioso documento este que analizamos hoy, que sirve no obstante, para ser muy cuidadosos a la hora de interpretar la historia y de afirmar hechos que sin pruebas, no pueden ser calificados de históricos.

*José García Cano es académico correspondiente en Consuegra de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo.