El proyecto de creación de la Ciudad Administrativa de Ciudad Real, que se ubicará en el edificio del antiguo Hospital del Carmen, ha dado un paso decisivo con la aprobación del pliego de condiciones de cara a la licitación de obras con un presupuesto de 23 millones de euros. Se estima que el comienzo de la reforma arquitectónica y de accesos comience a finales de 2020 y principios de 2021, con un plazo de ejecución de 24 meses. De esta forma, la Ciudad Administrativa de Ciudad Real podría ser una realidad, en el mejor de los casos, a finales de 2022, dentro del Plan de Modernización de Ciudad Real 2025.
El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha informado de la aprobación de este proceso de licitación, tras el último Consejo de Gobierno celebrado ayer, con un gasto en algo más de un millón de euros correspondiente al proyecto y dirección de obras: un plan de ejecución de “máxima relevancia” que conllevará un plazo de 35 días para presentar ofertas una vez abierto el procedimiento administrativo, momento a partir del cual comenzará un periodo de seis meses para la elaboración del proyecto.
Ruiz Molina añadió que el presupuesto total ha aumentado desde el planteamiento inicial -18.6 millones de euros en febrero- y que “no seremos cicateros”, en alusión a que el precio aportado por las empresas supondrá sólo el 20% dentro de una adjudicación en la que “importará la solución arquitectónica, buscaremos la mejor”. La alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, ofrecía el dato de 23 millones de euros de presupuesto total, sumando expediente de licitación, obras, Plan Funcional, mobiliario... una cifra muy superior a los "14-15 millones" esbozados en los albores del proyecto.
Esta Ciudad Administrativa, de 24.000 metros cuadrados, dará cabida a más de un millar de empleados públicos y se estima que cerca de 1.200 ciudadanos harán uso de este edificio de manera diaria. Ruiz Molina señaló que las instalaciones darán cabida a empleados públicos “de los servicios periféricos que están en edificios no siempre mantenidos, oficinas dispersas que sufrieron deterioro durante la etapa de Cospedal”, señaló Ruiz Molina.
En este sentido, Pilar Zamora manifestaba que esta«realidad planificada» servirá para dar «el mejor servicio posible ante la dejadez de otros que afortunadamente ya no están» y aludió asimismo al incremento del presupuesto marcado inicialmente.
Por su parte, el presidente de la Diputación Provincial de Ciudad Real, José Manuel Caballero, señaló que «estudiaremos las propuestas, pensando en la gente más joven y en el punto de vista turístico» sobre el uso de los edificios que queden sin ocupación tras el traslado de los empleados públicos a la Ciudad Administrativa y que serán cedidos a la instititución provincial.