Todos a hombros en Torralba

Rafael Zaldívar / Torralba
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Ocho orejas se repartió la terna en el bonito coso calatravo. Jesús Mejías, cortó tres orejas en la tarde de su alternativa

Curro Díaz. - Foto: Ana Muñoz

Corrida bien presentada del hierro de ‘Las Monjas’, de diferente condición y juego. De buen comportamiento en los caballos, con poder, recibieron duro castigo en los puyazos que tomaron. Los mejores, primero y segundo. Salió airoso el toricantano, natural de Almorox, que recibió por verónicas algo movidas al que abrió plaza. Una vara recargando y quite por chicuelinas. Bien la cuadrilla en banderillas. Pases de tanteo y series sobre ambas manos, mejor con la mano diestra, ya que salieron enganchados los naturales. Muy dispuesto, las tandas resultaron desiguales, pero el público que estaba con él, le aplaudió su quehacer. El astado tenía fijeza y celo. Dos pinchazos y estocada. Oreja. En el sexto, lanceó animoso, soltando el capote en el remate. El astado fue el de más poder de los seis, tomando dos varas fuertes, llegando a derribar. Tenía el defecto de llevar la cara a media altura y por tanto, no humillaba. Series poco ceñidas, rápidas, a un toro que se volvió incómodo y con cierto peligro. El espada no se arrugó y le pudo. Media en buen sitio y dos orejas.

Eugenio de Mora, lanceó al castaño segundo; una vara larga y el burel espera en banderillas. Blandeó en la faena de muleta, yendo a más en las tandas, bien cerradas con el de pecho. Los naturales le salieron poco ceñidos; lo mejor la estocada. Oreja. En el cuarto de lidia ordinaria, un toro altón y zancudo, de poca clase, Eugenio lo saludó con lances hacia la boca de riego. Tras el segundo tercio, un pase de la firma con mucho sabor. El toreo en redondo le salió más centrado, embarcando bien a la res. Al final, el animal hizo ademanes de irse a la querencia de tablas y allí le presentó pelea el de Mora. Estocada fácil y dos orejas para el veterano diestro.

Curro Díaz, con el peor lote, sufrió una colada del bovino tercero que a punto estuvo de costarle caro. Tenía cuajo y kilos el castaño, que apretó con los riñones al varilarguero. Quedaron los seis palos en el morrillo antes del brindis a la concurrencia. Toro difícil, que tenía mucho que torear; poco a poco lo fue metiendo en el canasto, brillando en los redondos. Estocada algo tendida y oreja. En el ‘acapachado’ quinto, lances sentidos, que se convirtieron en el remate, en una voltereta y el consabido susto. Faena con rabia de Curro Díaz, a un toro que no terminó de coger los vuelos. Sí dejó patente los destellos de su clase torera. Buena estocada y nuevo apéndice.

Corrida entretenida que acabó con los espadas y el mayoral a hombros, un tanto exagerado. La plaza registró una buena entrada dentro del aforo permitido.