La Policía Nacional va a reforzar la seguridad en su demarcación con motivo de la campaña de la vendimia y se va a llevar un control de extranjeros que van a trabajar en las explotaciones agrícolas de la provincia para evitar situaciones irregulares y posibles delitos contra los derechos de los trabajadores.

Según ha podido saber La Tribuna, la Policía Nacional va a controlar igualmente los asentamientos de temporeros y va a colaborar estrechamente con las autoridades sanitarias y rastreadores para detectar posibles casos de coronavirus y actuar en consecuencia con el fin de evitar la aparición de brotes. Fuentes policiales han asegurado que se van a redoblar los esfuerzos para garantizar la «seguridad» y tener una vendimia segura en tiempos de COVID-19.

Precisamente, el delegado del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, se desplazó ayer hasta Ciudad Real para mantener una reunión en la Subdelegación del Gobierno con motivo de la campaña de la vendimia. Al encuentro asistieron la subdelegada del Gobierno en la provincia, María Ángeles Herreros; el comisario jefe provincial de la Policía Nacional, Alberto Camacho; y el teniente coronel jefe de la Comandancia, Juan Antonio Valle.

En la reunión se hizo un análisis en profundidad para proteger todos los flancos. Se analizó tanto el ámbito laboral, como el sanitario o social con especial atención a la seguridad en las zonas de influencia.

Tierraseca indicó que se va a «reforzar la presencia» de Policía Nacional, Guardia Civil e Inspección de Trabajo en los lugares de recolección de la uva y en las zonas de transformación.

El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha también recordó que «se lleva trabajando tiempo en esta preparación» para que la campaña de vendimia se desarrolle con total normalidad. «Durante las semanas anteriores hemos estado en permanente contacto con el general de Zona de la Guardia Civil y con el jefe superior de Policía en la región con el fin de preparar la campaña, especialmente por la gran cantidad de temporeros que participan en ella, y de reforzar nuestra coordinación con la autoridad sanitaria, con la que hemos mantenido un diálogo fluido».

Según ha informado la Subdelegación del Gobierno en un comunicado, la vendimia representa una oportunidad laboral y se constata en que la participación de temporeros en la comunidad autónoma cada año roza las 20.000 personas, siendo la provincia de Ciudad Real la que mayor número de mano de obra precisa.

Y para garantizar el desarrollo de esta campaña sin problemas, la Policía Nacional y la Guardia Civil de Ciudad Real han establecido servicios especiales para la vendimia, que se suman a la labor de refuerzo que están desarrollando en todos los municipios de la provincia en los que la autoridad sanitaria está ejecutando medidas especiales de control del COVID-19.

«Estamos reforzando nuestra presencia para control de las condiciones sociolaborales, junto a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, así como los controles en materia de extranjería, manteniendo la actividad preventiva de la delincuencia en el campo», indicó el delegado del Gobierno en la región, que se ha comprometido a «prestar los auxilios correspondientes a todas aquellas administraciones que así lo soliciten».

En la reunión, Tierraseca destacó «la gran efectividad y coordinación» que la Policía Nacional y la Guardia Civil, junto a la propia Subdelegación y a las administraciones autonómica y judicial, han demostrado. En este contexto, señaló la actuación para evitar un acto multitudinario negacionista hace unas semanas programado en Retuerta del Bullaque y la realizada para lograr la prohibición de una fiesta en un pub de Alcázar de San Juan. «Son claros ejemplos de coordinación interinstitucional y de gran diligencia demostrada por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Subdelegación, Delegación de Sanidad y Juzgados», concluyó el representante del Ejecutivo central en la región.