Varias temporadas después el fútbol sala provincial volverá a contar con un representante en la División de Honor, máxima categoría juvenil. El Racing Alcázar logró el ascenso la campaña anterior y, tras un verano frenético, se lanza a asumir un reto en el que el objetivo principal será lograr la permanencia. 

El conjunto alcazareño, que estará entrenado por Manuel Comino, quedó encuadrado en el Grupo IV y debutará este domingo en el pabellón Antonio Díaz Miguel (18.30 horas) frente al Moprisala Olías toledano. El horario habitual de los encuentros durante la campaña será el sábado a las 17 horas.

A la dificultad que implica el salto de categoría, hay que sumar el cambio generacional, de tal forma que hasta siete jugadores que protagonizaron el ascenso no pueden continuar por edad esta campaña en el equipo. 

Todos los jugadores, a excepción de uno, son naturales de Alcázar de San Juan, por lo que se trata de un proyecto eminentemente local que va a tener que verse las caras con filiales como los de Movistar Inter, Talavera, Móstoles, Rivas o conjuntos de gran solera en el fútbol sala. Este Grupo IV lo integran 16 equipos de Madrid, Extremadura y Castilla-La Mancha y el gran objetivo del Racing de Alcázar será evitar las tres últimas plazas, que condenan al descenso. 

Este ascenso a la máxima categoría juvenil del equipo de fútbol sala se enmarca también dentro de un proceso de crecimiento del Racing Alcázar, que partió con un conjunto femenino de fútbol once en Liga Regional y que ahora ya posee, además, cinco equipos de fútbol sala: Tercera División, División de Honor Juvenil y los recién creados alevín, infantil y cadete.