El acuerdo alcanzado la semana pasada a nivel nacional sobre la reforma laboral no convence del todo a la patronal ciudadrealeña, que discrepa con los sindicatos en su valoración de las nuevas reglas del juego del mercado de trabajo. Y es que para el presidente de la Federación Empresarial de Ciudad Real (Fecir), Carlos Marín, no se trata del mejor acuerdo posible pese a que valoró lo ratificado por el presidente nacional de los empresarios en una negociación en la que considera que hubo «mucha presión» y también «mucha premura» para sellar el pacto a tres bandas que finalmente se firmó entre el Ministerio de Trabajo, la patronal y los sindicatos. Aún así, Marín destaca que al menos no ha sido una derogación total, solo una reforma, pero no la mejor para combatir los problemas laborales que tienen los jóvenes y tampoco para el campo, para el que es «malo», dijo. «No se va a acabar con la precariedad del mercado laboral juvenil con este acuerdo ni se va a conseguir que haya una mayor incorporación de la gente joven al mercado laboral», sentenció.

Sin embargo, para la secretaria general de UGT en Ciudad Real, Alfonsi Álvarez, se trata de «un acuerdo positivo» en el que destaca que las tres 'patas' del diálogo social se pusieron de acuerdo y que además supone «un paso más» para frenar la alta temporalidad en la contratación, que es sinónimo -dijo- de «precariedad». También subrayó el acuerdo alcanzado en relación a la ultraactividad, ya que el nuevo texto establece que si terminado el tiempo de negociación de un convenio sigue sin acuerdo, se mantendrá su vigencia, del mismo modo que destacó que el convenio colectivo sectorial será el de referencia salarial.

Por su parte, el secretario general de CCOO en Ciudad Real, José Manuel Muñoz, afirmó que el acuerdo es «el fruto de la firmeza, de la constancia y de la lucha de millones de personas trabajadoras contra la imposición unilateral de la que hemos sido rehenes durante muchos años». Asimismo, considera que se da «un gran paso adelante para acabar con la inestabilidad jurídica de los derechos de los trabajadores» y que además se consiguen los objetivos marcados: la recuperación de su espacio dentro de la negociación colectiva, se «ataca esa temporalidad injustificada» y «se da un golpe grande a las empresas multiservicio que aplicaban convenios que no se correspondían con el sector donde aplicaban esas actividades» y, por último, «se fortalece la figura del contrato indefinido».